‘Superman’ López reina en Sierra Nevada y Froome gana más tiempo
C. DE TORRES | SIERRA NEVADA
El colombiano Miguel Ángel López volvió a ser Superman en Sierra Nevada firmando su segunda victoria con otra exhibición en solitario en la decimoquinta etapa disputada entre Alcalá La Real y Sierra Nevada, de 129,4 kilómetros, en la que el británico Chris Froome (Sky) conservó sin oposición el jersey rojo de líder.
El mejor escalador y líder de los jóvenes se llama Miguel Ángel López, tiene 23 años y nació en Pesca (Boyacá). Lo demostró en Calar Alto y repitió en el Alto Hoya de la Mora, en Sierra Nevada, con otro ataque fulminante que clavó a Alberto Contador, compañero de fuga, para lanzarse hacia la cima después de rebasar también al británico Adam Yates.
Desplegó las alas López para levantar los brazos con tiempo para el deleite. Marcó en meta 3h.34.51, a una media de 36,1 kms/hora. Le siguió a 36 segundos el ruso Zakarin (Katusha), que saltó al tercer puesto de la general, el holandés Kelderman, fuera del podio, a 45 y a continuación el colombiano Esteban Chaves (Orica) y el líder, Chris Froome, cuyo arreón final le permitió endosar 6 segundos a Vincenzo Nibali, su principal rival, ahora a 1.01 minutos.
Mal día para Alberto Contador, protagonista con un ataque marca de la casa en El Purche y sin fuerzas al final. Perdió un puesto, es noveno a 3.59 y a 1.51 del ‘cajón’. Y peor jornada para David de la Cruz (Quick Step) hundido desde el Purche, sufriendo en solitario hasta perder cinco minutos. Fuera del top ten, undécimo a 7.47.
Etapa corta, pero matona, de esas que nacen a toda mecha, motivan a los aventureros y terminan con el «sálvese quien pueda» de los hombres de la general en las rampas que conducen a meta. Un esprint de 129 kilómetros con 3 puertos y 3.305 metros de desnivel acumulado para la lucha y supervivencia.
En suma, fue una jornada tranquila para Froome que descansará en Logroño con la seguridad de sus fuerzas y del control que ejerce su equipo de la carrera. En Sierra Nevada dio otro paso hacia Madrid. Y llega la contrarreloj de 40 kilómetros.