El Movistar ejerce el control con el Mitchelton y Astana en un segundo plano

El Movistar mostró ayer sus cartas. Ya lo había hecho en alguna de las etapas precedentes aunque en la de La Camperona dejó patente que va a por todas y con dos puntales como Nairo Quintana y Alejandro Valverde no puede permitirse un descontrol en la carrera. Y menos si esta tiene como escenario la montaña.

El trabajo de la escuadra telefónica, aunque no tuvo sus frutos con un triunfo de etapa sí lo hizo con el final de un Nairo Quintana que lograba hacerse con un puñado de segundos respecto a Yates, su más directo rival ayer. También estuvo notable Alejandro Valverde al que la cota de Sotillos de Sabero sigue dándosele bien. El resto de candidatos a vestir el maillot de líder tampoco perdieron excesivo tiempo. Ni un Miguel Ángel López al que la salida de la cadena en el tramo decisivo le obligo a pararse en seco. No podía echar por tierra el trabajo que durante una parte de la jornada también había realizado el Astana. En cuanto a Yates, su equipo el Mitchelton sólo apareció al final mientras que otra formación que se esperaba diera mucha guerra como el Lotto-Jumbo de Kruijswijk y Bennet no tuvo su mejor día. Y el holandés se dejaba 25 segundos respecto a Nairo que al final, aunque no son excesivos, sí pueden pesar en una clasificación tan comprimida en la que cada segundo se pelea como si fuera el definitivo. Y tal vez pueda serlo al final.