El Palacio refuerza la fe del Ademar
Guijosa hace un llamamiento a la afición para que acuda en masa al partido ante el Wisla Plock, el rival más fuerte del grupo El equipo cree en una victoria épica a pesar de las bajas que arrastra.
sergio c. anuncibay | león
La «épica y la magia del Palacio» son para Guijosa como un cuchillo afilado que blandió en la previa del enfrentamiento ante el Wisla Plock (19.30 horas, TDP), de largo el equipo con más recursos del grupo europeo. El Abanca Ademar necesita más que nunca el respaldo de la afición para sobreponerse de las dos últimas derrotas, ante el Elverum y el Teucro, que han abierto una pequeña herida en el equipo, lastrado por ambos tropiezos, pero también por el desgaste acumulado de tanto partido.
Por eso, el técnico dio a la plantilla un día de descanso, el pasado jueves, consciente de que sus jugadores necesitaban un pequeño receso antes de enfocar la mirada al compromiso de hoy. «Estamos en una situación difícil pero hay que salir adelante», apuntó ayer el entrenador del conjunto leonés, que apoya en el terreno de la épica todo lo que sea puntuar ante el conjunto polaco, aunque no pierde la fe, sobre todo porque sabe que tienen a la grada de su lado.
No obstante, tendrá que hacer encaje de bolillos ante la ausencia de varias piezas importantes del engranaje. Tanto en defensa como en ataque. Juanjo Fernández sigue de baja y aún no se sabe por cuánto tiempo. Está pendiente de una nueva resonancia magnética que aclare el alcance exacto de la lesión que sufrió en el hombro izquierdo. Tampoco podrá entrar en la convocatoria Juanín García, que todavía no ha debutado esta temporada por un problema en el gemelo. Y el último en caer ha sido David Fernández, que arrastra un edema óseo tras un golpe en la rodilla derecha.
Eso hace que Guijosa tan sólo cuente con Ivan Mosic en el lateral izquierdo y con Fede Vieyra en el derecho. De todas formas Acacio Marqués y Rodrigo Pérez podrían ocupar en algunos momentos esa posición para darles descanso.
El que sí estará es Mario López, que regresó como un tiro frente al Teucro. Guijosa cree que está en condiciones de disputar más minutos frente el Wisla Plock, al que ve como el rival más complicado al que se han enfrentado este curso. «Si estuviéramos al cien por cien en todos los sentidos sería muy difícil ganarles, pero así es todavía más complicado», reconoció Guijosa, que sin Juanjo tendrá que inventarse también una solución en el centro de la defensa para taponar las embestidas del equipo entrenado por Xabier Sabate, sucesor de Manolo Cadenas en ese banquillo. «Hay que ser capaces de frenar a sus lanzadores y encontrar fisuras en su defensa», avisó el técnico, que, más allá de las diferencias evidentes entre una y otra plantilla, aseguró que solo piensa en la victoria. «Hay que venir llorado de casa porque esto es para valientes. Nos enfrentamos a ellos con toda la ilusión y no habrá excusas. Saldremos a ganar», subrayó Guijosa, que pidió una vez más el respaldo del Palacio para acorralar a un Wisla Plock que tiene en sus filas a jugadores contrastados, como el brasileño Guilherme Toledo o Nacho Moya, además del Renato Sulic, un clásico del balonmano europeo.