El Ademar desafía a la lógica

Sergio C. Anuncibay | León

Si uno compara el presupuesto del Wisla Plock con el del Abanca Ademar, pensará que el equipo leonés no tiene ninguna opción en Polonia, donde juega mañana su segunda final en siete días para allanar el camino hacia la siguiente fase de la Champions. Las diferencias son palmarias sobre el papel. Una plantilla plagada de internacionales frente a otra que conjuga experiencia y juventud.

No será un reto fácil. Enfrente estará el «equipo más potente del grupo», que ha hecho una inversión importante en la confección del bloque para superar esta primera ronda del torneo continental. Y hay tanta igualdad entre todos los aspirantes que lo más normal es que únicamente un pleno de victorias garantice la clasificación del conjunto leonés, convencido de que puede asaltar la pista del Wisla si pone sobre el parqué su mejor versión. Son ambiciosos. «Mi equipo va a ir a ganar, aunque no con tanta presión como ellos», apuntó ayer Guijosa, al que las cuentas solo le salen si trae un triunfo de Polonia. «Tenemos ilusión de estar en la siguiente ronda y eso pasa por lograr una victoria allí», subrayó el técnico, quien reconoció que tras el partido contra el Barcelona del Palau —el martes—su plantilla acusa cierto desgaste físico y mental, pero está seguro de que mañana sábado dejarán atrás ese cansancio y plantarán batalla.

Sabe que el Wisla Plock parte como favorito y que el Abanca Ademar «tiene el presupuesto más bajo de la Champions». Pero también recuerda que los leoneses han competido en todos los encuentros y que no «van a dejar escapar» la oportunidad de igualar, al menos, lo que hicieron el año pasado. Quieren estar entre los 16 mejores equipos del continente. Y van a dejarse la piel por conseguirlo.

De todas formas, Guijosa cree que el compromiso de Polonia será, incluso, más duro que el disputado en León, resuelto a favor del Abanca Ademar. Sabe que es «muy complicado ganar fuera». Y no sólo por la dificultad de los rivales. También por el tipo de arbitrajes, «más permisivos con el conjunto local», analizó el técnico, que ve poco probable que puedan sorprenderse mutuamente desde el punto de vista táctico y técnico.

En este sentido, apuntó que tanto el Abanca Ademar como el Wisla ya han puesto «encima de la mesa todas sus armas». Apeló, en su caso, a la defensa como principal argumento para contrarrestar el potencial ofensivo de los polacos. Puso como ejemplo el encuentro de esta semana frente al todopoderoso Barcelona. «Si hacemos lo mismo que en los primeros minutos de ese partido no tendremos ninguna opción, pero si repetimos el juego que supuso el parcial de 8-15 podremos hacerles daño. Sabemos que ellos son superiores pero nos hemos ganado el derecho de pelear de tú a tú», avisó.