Repliegue y contraataque

E sos dos conceptos tácticos simples bien ejecutados fueron suficientes para que el Fuenlabrada se impusiera a la Cultural en un partido carente de ritmo y con escasas ocasiones.

A veces nos encontramos este tipo de equipos en Segunda B, equipos que cumplen casi a rajatabla tanto en estructura como en estilo de juego patrones clásicos del fútbol. Un sistema de juego 1-4-4-2 sin balón, que sólo se veía alterado en acciones de saque de meta de Palatsí, en el que esa línea de cuatro mediocentros, se convertía en un rombo con el objetivo de tapar la salida en corto sobre Yeray en la zona interior. Único atisbo de presión alta en los fuenlabreños, ya que el resto de acciones permanecían en un repliegue intensivo, con continuas basculaciones y ayudas permanentes en las acciones exteriores de los leoneses, aspecto que dificultó, que estos pudiesen ejecutar con cierto criterio el recurso de centros al área tan empleado habitualmente por el conjunto leonés.

Con balón, los recursos del Fuenlabrada eran claros, buscar la transición rápida a través de Randy principalmente, o encontrar centros lejanos en escasas acciones de juego posicional. A todo ello se le sumó el uso de las acciones a balón parado. De esa manera llegó el gol. Saque de esquina ejecutado por Mikel Iribas, para el remate de Juanma Marrero, curioso y poco habitual, que el lanzador fuera el lateral derecho que dio la asistencia para uno de sus centrales. Difícil de ejecutar con tanto hombre grande la defensa individual mayoritaria en un saque de esquina. Quizás la aportación de un jugador en defensa zonal pendiente de corte, pudiese haber ayudado la labor?.

La Cultural, por su parte, poquito bagaje pudo ofrecer ayer. Misma estructura con Ortiz y Eneko intentando entrar hacia dentro desde fuera, que chocaron con la predominante defensa de balones interiores del Fuenlabrada. En la segunda parte, los tres cambios leoneses fueron hombres exteriores, Liberto, Zelu y Kawaya, con la intención imaginamos, de buscar balones fuera y centros al área, aunque la buena defensa de ayudas de los madrileños, bloqueó dicho intento.

Este partido nos deja de nuevo un cambio de líder, un Fuenlabrada que si miramos la clasificación por ejemplo del Grupo IV, ni siquiera entraría en play off con los puntos que tiene, muestra este dato de la máxima igualdad que se vive en este Grupo I