UN PENTACAMPEÓN EN APUROS
Lorenzo, en plena crisis: 'Soy un campeón y voy a conseguirlo'
'Solo espero que Honda tenga tanta paciencia como yo para ayudar a terminar siendo competitivo', señala el tricampeón mallorquín de MotoGP El compañero de Márquez en el 'team' Repsol Honda reconoce que le sigue costando horrores meter la moto en las curvas y que por eso no es veloz
Jorge Lorenzo, entre Marc Márquez y Andrea Dovizioso, en la presentación del Mundial, en Catar.
De nuevo una situación durísima, mucho más de lo imaginado. Todo el mundo creía que Jorge Lorenzo, pentacampeón del mundo y tres veces rey de MotoGP, incluso en la era Márquez, se adaptaría más rápido a la Honda RC213V de lo que tardó en hacerlo con la potente Ducati Desmosedici. Pero no está siendo así. Es más, tras su pésima carrera, el pasado domingo, en Jerez (acabó12, a más de 15 segundos de su compañero vencedor) y sus dos caídas, en el test de ayer, ha reconocido que es muy duro volver a la situación vivida en Ducati, pero soy un campeón y lo voy a conseguir. Solo espero que Honda tenga la misma paciencia que yo, tengo este año y el próximo para lograrlo.
La jornada de ayer de Lorenzo, en Jerez, fue positiva y negativa a la vez, puede, sí, que más negativa aunque tuvo la suerte de salvar sus dos caídas sin daños físicos. Fue de los que más vueltas dio (93), solo superado por Maverick Viñales (94), pero, eso, sufrió dos caídas. La primera se produjo en la curva 6 recientemente bautizada como curva Dani Pedrosa- y fue muy leve, mientras que la segunda fue justo al final de la jornada en la rápida curva 7. Este segundo incidente fue más fuerte y Lorenzo sufrió un fuerte golpe en la pierna, aunque no tiene ninguna lesión reseñable.
Las caídas, tal vez, incluso, la insatisfacción de poder dar explicaciones de lo que está ocurriendo, 24 horas después de haberse lamentado de su resultado en Jerez donde tenía depositadas grandes esperanzas e ilusiones, fue lo que recomendó a Lorenzo y al equipo Repsol Honda que el mallorquín no diese conferencia alguna como el respeto de estrellas que participaron en la larga sesión de test.
El tema principal es que esta moto, para mi estilo de pilotaje, todavía no me da confianza, sobre todo entrando en curva, comentó el domingo Lorenzo. Soy muy lento entrando en curva, comparado con los otros pilotos de Honda. En mitad de curva voy más o menos igual, en aceleración voy igual que ellos o incluso mejor, pero entrando en curva pierdo mucho y tengo que encontrar la solución para que esta Honda me dé más confianza y me pueda fiar de ella al entrar en las curvas. Ahora no entro, entro demasiado derecho, la paro mucho y pierdo décimas que después no recupero en otras zonas del circuito.
El mallorquín reconoció, el mismo domingo, sus problemas para ser competitivo, para pilotar al más alto nivel y para poder codearse con los muchos pilotos, cada vez más, que aspiran al podio en cada carerra de este año. En carrera, no tuve ritmo ni rodando solo, iba muy lento. Una carrera muy dura psicológicamente porque tenía muchas esperanzas puestas aquí. Una posición difícil de aceptar y un resultado muy malo. Hay que estar decepcionado y preocupado. La situación es muy dura pero solo queda seguir trabajando".
"Estoy preocupado pero sé que el resultado llegará, insistió el pentacampeón de MotoGP con Yamaha, la última vez en el 2015. No solo tengo tres o cuatro carreras, quedan todas las de este año y las del que viene. Espero que Honda intente darme lo que necesito con tanto empeño como el que pondré yo. Si es así lo conseguiremos. Ahora es cuando hay que demostrar de qué pasta estoy hecho. Aquí es donde se demuestra la diferencia entre un campeón y uno que no lo es. Soy un campeón y lo voy a conseguir".