Los derechos televisivos están en peligro
JOSÉ MANUEL ANDRÉS
El fútbol español se la juega y no precisamente sobre el césped. El enésimo conflicto entre la Federación Española de Fútbol (FEF) y La Liga, en este caso por los partidos de los viernes y los lunes correspondientes al campeonato liguero, se acerca a su resolución, toda vez que el Juzgado de lo Mercantil de Madrid debe dictaminar hoy si finalmente da luz verde a la disputa de encuentros más allá de la franja de sábados y domingos que la Federación pretende establecer después de que el pasado 26 de julio la jueza única de Competición del organismo que preside Luis Rubiales prohibiese la celebración de partidos los viernes y los lunes.
De esa resolución definitiva dependerá en gran medida el futuro de los actuales contratos en materia de derechos televisivos de la Liga con operadores nacionales e internacionales, que suponen un montante superior a los 2.000 millones de euros de ingresos.
Lo cierto es que actualmente, la situación económica de los clubes españoles ha cambiado drásticamente respecto a la de hace unos años. Más allá de casos puntuales como el del Reus, en el fútbol profesional los impagos y las deudas van quedando atrás y lo hacen en gran medida gracias al dinero de las televisiones, que ha permitido al sector fijarse el objetivo de liquidar en 2020 la totalidad de su deuda con Hacienda y Seguridad Social, un agujero negro hace sólo unos años. En la temporada 2017-18 se repartieron 1.506,4 millones de euros entre los 42 equipos de Primera y Segunda, de los que 1.325,8 correspondieron a los 20 de la máxima categoría, distribuidos a tenor de un montante fijo para cada club y otro variable en función de la clasificación de las últimas cinco temporadas y de la implantación social de la entidad, un criterio basado en la asistencia de espectadores a los estadios y en las audiencias televisivas.
Barcelona, Real Madrid y Atlético fueron los más beneficiados por la lluvia de dinero de las televisiones, con 154, 148 y 110,6 millones, lo que supone un volumen de ingresos más que reseñable en sus presupuestos más allá de su condición de transatlánticos del fútbol mundial. En cualquier caso, si el dinero de las televisiones ya resulta importante para los grandes de la Liga, entre la clase media y baja del campeonato se erige en el pilar principal de su volumen de ingresos, muy por encima de otras partidas como patrocinios, abonos y venta de artículos oficiales y de entradas.