España, primer peldaño al oro
A. DE CASTRO | CANTÓN
Túnez, vigente campeón de África, es hoy (14.30 horas) el primer escollo en el Mundial de la renovada selección española, gran favorita del Grupo C y que no se puede permitir despistes en su camino a Pekín, ya que los resultados de la primera fase contarán en la segunda y determinarán futuros cruces.
El equipo que dirige Sergio Scariolo busca dejar atrás las ausencias de hombres como Pau Gasol o Sergio Rodríquez y prolongar las buenas sensaciones dejadas en la mayor parte de los partidos de preparación, empañadas solo por el traspié final frente a Rusia y la previsible derrota ante la favorita, Estados Unidos. Según lo visto en los últimos entrenamientos, el técnico italiano podrá contar con sus doce hombres una vez recuperado Marc Gasol de los problemas estomacales que le dejaron fuera de juego en el Torneo de Ningbó y superadas las molestias físicas que arrastraban algunos de sus compañeros en los últimos días. El gran momento de Ricky Rubio, el liderazgo de un Gasol que viene de ganar el anillo de la NBA, la veteranía de hombres como Llull y Rudy Fernández y la ilusión que generan los polivalentes Juancho Hernangómez y Claver apuntan a ser las principales bazas del conjunto español.
Todos serán claves para certificar el papel de aspirante a todo de una plantilla que tendrá en Cantón como sus primeros rivales a las selecciones de Puerto Rico, Irán y Túnez, los actuales campeones de África y que regresan a un Mundial nueve años después.
Encabezados por el veterano pívot Mejri, exjugador del Madrid que en las últimas cuatro temporadas ha militado en los Mavericks, los tunecinos aspiran a uno de los dos billetes que permiten seguir con vida en el torneo, conscientes de que el rival de su debut es superior en todas las líneas y aparece en todas las quinielas como primero de grupo.
«Va a ser una batalla muy intensa. Ojalá no empezáramos el torneo contra la selección española, pero es lo que toca», dijo antes del Mundial el pívot, quien definió a los de Sergio Scariolo como un equipo «increíble», que aúna «química y talento» y lleva tanto tiempo jugando junto «que puede hacerlo con los ojos cerrados».
El escolta Michael Roll, que tras jugar en el Maccabi cambiará de aires y militará en el Olimpia de Milán es otra de sus grandes amenazas. A igual que Mejri, que se perdió la última ventana de clasificación y regresa al equipo nacional en China 2019.