Cembranos, reválida en el Bernabéu

Luis Cembranos pisará hoy el césped del Santiago Bernabéu, un escenario en el que el leonés ya ha sido protagonista. Lo fue en el 2003 cuando militaba en el Rayo Vallecano como jugador. Y además con gol incluido. Hoy tratará, en este caso como entrenador,. de amargarle la noche al Real Madrid con el Leganés, club al que llegaba del filial para hacerse cargo del banquillo de forma interina y que después del triunfo del pasado sábado frente al Mallorca parece que puede alargar su vinculación como primer espada. En el Bernabéu un resultado positivo esta noche (21.15 horas Movistar Liga) puede acabar por certificar su continuidad. «Es un rival muy incómodo. Tienes que estar lo que dure el partido al cien por cien, que su efectividad no sea la ideal, que cometan errores y tu estés muy acertado. Es un partido donde hay que disfrutar, ser realistas. Pero estoy convencido de que el equipo va a competir», señaló en la rueda de prensa previa.

«Tenemos un gran partido por delante, el reto de intentar sacar algo positivo que anímicamente nos vendría estupendamente. Es un grandísimo equipo pero también tienen carencias y vamos a intentar sacarle esa cara que también tiene», completó, El leonés también se refirió ayer en la previa del encuentro ante el Madrid a su situación en el plantel pepinero. «Disfruto. Vivo el día a día, entreno y trabajo porque soy un empleado del club. Me toca preparar el partido de mañana y estoy encantado de estar aquí, de disfrutar y aprovechar esta oportunidad. Soy conscientes de la situación que estoy viviendo, valoro el reto que me ha puesto en el camino la situación. Y estoy agradecido por la confianza que me han demostrado desde que llegué al club», manifestó. Regresa el fútbol a Bernabéu 25 días después, y el Real Madrid a la competición tras el aplazamiento del clásico, en medio de un ‘incendio’ inesperado por el galés Bale que salpica al duelo ante un Leganés algo más aliviado tras su primer triunfo del curso.  

La primera lesión de la temporada de Bale ha desatado una nueva crisis interna en torno al galés. De nuevo un problema de sóleo que tanto ha afectado en sus años de madridista, le frena en seco. Sigue de baja tras caer lesionado con su selección y busca nuevas opiniones en Londres, con permiso del club pero sin hablarlo con su entrenador. Mientras, Zidane intenta centrarse en lo deportivo. Los días sin competir por el aplazamiento del clásico le han servido para recuperar jugadores como Luka Modric o Lucas Vázquez. Sigue sin poder contar por lesión con Nacho y Marco Asensio, y es baja para este encuentro James Rodríguez tras su paternidad.  

No quiere relajaciones innecesarias en el presente, consciente de que el Barça ya ha encontrado su rumbo y que debe firmar el pleno de puntos en dos encuentros consecutivos en el Santiago Bernabéu en tres días, ante el colista Leganés y un Betis en mala dinámica.