Fútbol
Villa, el ‘siete’ de la España campeona, cuelga las botas
«Siempre he dicho que prefiero dejar yo el fútbol antes de que el fútbol me deje a mí», proclamó David Villa al anunciar su retirada al término de la presente temporada de la liga japonesa. El delantero asturiano, que cumplirá 38 años el 3 de diciembre, considera que es «el momento perfecto» y mostró su deseo de culminar la temporada con el Vissel Kobe alzándose con el título de la Copa del Emperador, cuyas semifinales jugará su equipo el día 21 del próximo mes contra el Shimizu S-Pulse. «Si logramos pasar las semifinales, mi retirada será el 2 de enero y como campeones de la Copa», dijo Villa en alusión a la final de ese torneo japonés, prevista para el primer día de 2020.
Villa cerrará de este modo una carrera brillante. que comenzó en el Sporting y que gracias a su paso por Barcelona, Zaragoza, Valencia y Atlético consiguió un palmarés impresionante con todos los títulos que cualquier futbolista sueña: una Champions League, tres Ligas, tres Copas del Rey, tres Supercopas de España, una Supercopa de Europa, un Mundial de clubes, y la Copa del Mundo y la Eurocopa con España. Ganar el trofeo Zarra en la Liga (2006, 2007, 2009 y 2010) le hizo apropiarse por méritos propios del ‘7’ de España, con la que vivió los éxitos de 2008 y 2010.
Fue pichichi de la Eurocopa y logró la Bota de Plata del Mundial de Sudáfrica 2010 en el que marcó goles en cuatro partidos consecutivos (contra Honduras, Chile, Portugal y Paraguay) para que la selección pasase rondas y consiguiese una gesta hasta entonces inimaginable. «Cada uno de esos partidos con la selección fue para mí un sueño, y son lo más grande que he podido hacer como futbolista», reconoció en su despedida el máximo goleador en la historia de la selección (59 tantos en 98 partidos, el último en 2017, tres años después del Mundial de Brasil). La grave lesión de tibia sufrida a finales de 2011 le impidió formar parte de la selección en la Eurocopa 2012.
En su larga carrera Villa ha jugado en cuatro continentes, en África ganó el Mundial, y fue conquistando trofeos y el corazón de los aficionados casi al mismo nivel que sus compañeros, a los que atribuyó parte de los éxitos conseguidos.
A partir de ahora, el asturiano, que tiene también varias escuelas de fútbol para chavales, tendrá tiempo para dedicarse «a otras cosas», entre ellas la gestión de un club nuevo del distrito neoyorquino de Queens, el Queensboro FC, cuya adquisición anunció en la víspera y que en 2021 comenzará a competir en la USL. Antes le quedan tres partidos de liga y se verá hasta dónde puede estirar su registro anotador actual de 440 goles en 859 encuentros. Curiosamente, su amigo Esteban, al que conocía desde joven cuando estaba en el Oviedo, fue el meta al que más goles marcó, ya que el Sevilla fue su ‘víctima’ favorita.