Tenis | Copa Davis
La fórmula Nadal y al dobles
El número uno español supera a Daniel Evans (4-6 y 0-6) con su cuarta victoria individual en el torneo y lleva la semifinal contra Gran Bretaña al duelo por parejas
Otro día más, la fórmula Nadal. Como ante Rusia y como ante Argentina. Una jornada más en la oficina de Rafa Nadal, que doblegó al británico Daniel Evans (4-6 y 0-6) para nivelar la serie de semifinales de Copa Davis entre España y Gran Bretaña y llevar la resolución de la eliminatoria al dobles con su cuarta victoria en cuatro duelos individuales en el torneo, ese que el número uno mundial parece empeñado en conquistar cueste lo que cueste.
Feliciano López acababa de perder frente a Kyle Edmund, pero en el ambiente de la Caja Mágica flotaba la sensación de que lo de Nadal contra Evans era un trámite a la espera de que el dobles arreglase la papeleta y metiese a España en la final de la Davis siete años después. En resumen, que pasase lo mismo que ocurrió en la jornada inicial y en cuartos de final.
No tiene que ser algo sencillo vivir con una presión semejante a la que soporta Nadal. El público español adora al balear, corea con pasión cada uno de los innumerables títulos que ostenta y que desde la megafonía se recuerdan en la presentación de cada partido y deposita todas sus esperanzas en que una vez más lleve a España al triunfo. Él, como el enorme campeón que es, acepta una vez tras otra el desafío.
Bien es verdad que no es el británico Evans el tenista más cualificado para sorprender al de Manacor. El tenista de Birmingham, que presentaba antes del duelo un balance de 9 victorias y 15 derrotas en 24 enfrentamientos individuales en la Davis, perdió sus dos partidos en la fase de grupos contra el neerlandés Haase y el kazajo Bublik, pero sorprendió al alemán Struff en cuartos para meter a Gran Bretaña en semifinales sin necesidad de disputar el duelo por parejas.
El número 45 del mundo, que ya le dio guerra a Nadal en la primera ronda en Montreal este mismo año, salió a la pista sin nada que perder, con la decisión de plantar cara el mejor tenista del mundo actualmente. Se mantuvo firme el inglés en su servicio, al menos hasta el sexto juego. Ahí apareció el primer puño en alto de Nadal, señal de que la cosa se pone fea para el rival. 40 iguales y la posibilidad de 'break' cercana, pero ni por esas.
"Solo hay una forma de hacer las cosas, que es ir paso a paso", dijo ayer Nadal tras la sufrida victoria ante Argentina. La paciencia es también una de sus virtudes y de ella hizo gala para madurar el partido. "Venga", gritaba tras cada golpe ganador. Y así se plantó con tres bolas de 'break' en el servicio del británico con 4-5 en el marcador. A la tercera dio el golpe el español. Llegaba la 'zona Nadal', esa en la que sin saber cómo, el partido está decantado a su favor.
Quedaba la duda de si Evans podría mantener semejante nivel de exigencia física en el segundo parcial. Nadal solventó con comodidad su servicio y al resto comenzó a ocasionar verdaderos problemas al británico, hasta el punto de encadenar el segundo 'break' consecutivo a su favor. El 0-2 fue demasiado para el jugador de Birmingham, totalmente fundido física y mentalmente por el esfuerzo del primer set y ya entregado a su suerte, tanto que se llevó un rosco en el segundo parcial.