Fútbol. Segunda División
El fair play financiero es obligación en Segunda B
La Federación insta a los clubes a cumplir con las exigencias tributarias, laborales y contractuales Sancionará la infracción
La Real Federación Española de Fútbol ya ha publicado las medidas de información y supervisión económica-financiera en las competiciones no profesionales de Segunda División B, Tercera División, Primera Iberdrola y Reto Iberdrola. El objetivo es contar con la información necesaria para conocer la situación de cada uno de los equipos que militan en estas categorías para, más adelante, fijar entre todos los requisitos que sean de obligado cumplimiento.
Como indica la circular número 22 de la presente temporada, ha sido una constante en todos los foros del fútbol profesional y aficionado del máximo nivel el hecho de plantear la conveniencia y la necesidad de que existieran una serie de mecanismos de control y supervisión del modelo económico financiero de los clubes, con el objetivo de garantizar el equilibrio económico de la competición, el fair-play financiero de la misma y la participación con unas garantías mínimas de cumplimiento de las obligaciones tributarias, laborales y contractuales. Desde hace ya unos años este modelo se ha implantado en las competiciones profesionales y la Real Federación Española de Fútbol entiende que ahora corresponde una adaptación del mismo a las competiciones oficiales aficionadas de máximo nivel, donde cada vez existe un mayor nivel de profesionalización y de laboralidad de los jugadores, entrenadores y estructuras.
Una vez se encuentren fijados los indicadores y valores de referencia de acuerdo a la información que remitan los clubes se podrán fijar las reglas de cumplimiento y, en su caso, si correspondiese, las reglas de ajuste o las medidas correctoras pertinentes.
De esta forma se inicia esta temporada una etapa de recogida de información y de evaluación del estado económico-financiero de las mencionadas competiciones, que se prolongará durante tres temporadas, avanzando en el conocimiento y en la evaluación conjunta del estado de situación y los modelos de control y fijación de los requisitos mínimos, todo ello con los clubes y con sus representantes en los órganos competentes de la Real Federación Española de Fútbol.
Superadas esas tres primeras temporadas y ya con datos suficientes, se podrá iniciar una segunda etapa en la que, conjuntamente con los clubes implicados y en el contexto de los órganos competentes de la Real Federación Española de Fútbol, se definirán unos nuevos modelos y estándares de control económico-financiero del fútbol oficial no profesional del máximo nivel competitivo. Será entonces, y no ahora, cuando se deberán valorar las acciones sancionadoras si así se considerase oportuno.