La árbitra que protege a Kawaya

El jugador de la Cultural y Deportiva Leonesa Andy Kawaya fue objeto de insultos racistas por parte de un reducido grupo de aficionados locales en el transcurso de la segunda mitad del encuentro Tudelano-Cultural disputado en el estadio Ciudad de Tudela, cuando el equipo visitante iba ya por delante en el marcador. A raíz de los gritos racistas al extremo belga de la Cultural, la asistente Mariona Peralta dio a conocer este hecho al delegado de campo, que de inmediato reaccionó y desde la megafonía del campo el speaker del Tudelano se hizo un llamamiento en nombre del club a la afición para que se abstuviera de realizar cualquier tipo de comentario racista, según publica Noticias de Navarra. Así de esta manera se cortó de raíz un capítulo desagradable que fue censurado por la inmensa mayoría de los seguidores locales.

Como prueba de que la afición del Tudelano mostró su contrariedad ante los gritos simiescos proferidos por un pequeño grupo de hinchas locales, cuando el jugador Andy Kawaya fue sustituido poco después, en el minuto 78 de juego, por Dani Pichín, la grada del Tudelano despidió al futbolista belga con aplausos, dejando así de manifiesto que la mayoría de los aficionados del club no es racista ni es partidaria de tomar la actitud del insulto hacia los futbolistas del conjunto rival, en este caso la Cultural.

El partido transcurrió sin más incidentes. Además, en el acta del encuentro, el árbitro Catalá Ferrán no reflejó la citada incidencia en su redacción. Nunca antes el campo del Tudelano había sido escenario de una escena parecida.