Supercopa de España
«En Arabia Saudí cené en un local sin baño para mujeres»
La periodista leonesa Patricia Cazón radiografía la realidad de Arabia Saudí
Ni en manga corta por la calle, ni acceso a la piscina del hotel ni, en algunos casos, baños para mujeres en los restaurantes. Suena a película rancia de serie B e incluso a broma de mal gusto sí, pero lo cierto —y triste— es que es parte de la realidad que están viviendo estos días las periodistas españolas desplazadas a Yeda para cubrir la Supercopa. La leonesa Patricia Cazón, redactora de Diario As , fue la primera en radiografiar una Arabia Saudí inmersa en una lenta pero profunda transformación moral en la que los derechos de la mujer comienzan, a duras penas, a comprender que existe luz al final del túnel. «Percibo que el país se está abriendo poco a poco, pero queda mucho por recorrer», señala a este periódico.
La periodista leonesa del diario As, Patricia Cazón. RAMIRO
«Tenía mucho miedo a la hora de hacer la maleta por el hecho de no saber muy bien qué ropa llevar, pero ni te miran raro por no ir vestida como ellas y en general son gente muy hospitalaria», aclara esta profesional del periodismo que cubre desde años la información del Atlético de Madrid. Aún así, ya ha visto cómo le vetaban la entrada a la piscina de su hotel. «Lo que no me gusta es que coarten mi libertad. Ninguno de los compañeros que estamos aquí íbamos a utilizarla, es el hecho de prohibírtelo lo que me alucina».
Al otro lado del ‘muro’
También se sorprendió la pasada noche cuando fue con el resto de enviados del Diario As a un restaurante para cenar. «Estuvimos en un establecimiento de comida rápida y no tenían baño de mujeres. Hablé con uno de los camareros para que me diera una solución y me dejaron entrar al de hombres cuando estaba vacío, él esperó fuera para que nadie me molestara». Tampoco pudo sentarse con ellos en un McDonalds —una pared dividía el local entre hombres y el resto— pero eso sí, le está permitido utilizar el gimnasio del hotel. ¿Por qué? Porque hay uno específico para ellas.
Para muchas de las saudíes —verdaderas víctimas de un sistema que apenas las contempla— esta Supercopa de España supondrá un paso más hacia la igualdad. Queda toda una galaxia —muy muy lejana— aún por recorrer. Quizá el fútbol le meta un gol definitivo al machismo.