«Resulta inigualable el hecho de jugar y ganar con mis amigos»
«Es un momento especial que no podré olvidar», señaló el de Belgrado, que anuló la rotunda victoria del español Roberto Bautista sobre el serbio Dusan Lajovic por 6-1 y 7-5, cerrando una gran exhibición en el torneo en el que ha ganado todos sus partidos individuales disputados. «No se puede igualar lo vivido esta semana, jugando y ganando partidos junto a mis amigos», expresó el serbio una vez conseguido el triunfo, con lágrimas en los ojos y la bandera serbia en los hombros. No era para menos la emoción de un Djokovic, que venció en sus ocho partidos en la competición y que demostró ante Nadal que es el favorito número uno al próximo Abierto de Australia. Feliz, el número 2 del mundo lo celebró eufórico.