España busca dar un paso de gigante hacia las semifinales

La selección de Jordi Ribera tiene en el partido de hoy (18.15 horas, Teledeporte) la prueba de fuego del Europeo 2020. Los Hispanos se miden a una de las anfitrionas, Austria, en Viena, en un pabellón que será una auténtica olla a presión. Porque las opciones de intentar luchar por las medallas para los austríacos pasan por derrotar a la selección española, y precisamente una victoria de los Hispanos colocaría a los de Jordi Ribera con pie y medio en las semifinales del torneo. Así pues, un partido crucial y decisivo para ambos conjuntos que aumentará la tensión sobre la cancha y pondrá en juego la capacidad de gestión de los nervios y la solidez de las dos selecciones. En caso de derrota, España aún dispondría de dos balas más en este Europeo, pero ya sin margen de error.

Austria se las prometía felices tras superar su fase de grupos con pleno de victorias, pero a las primeras de cambio y, ante una de las eternas favoritas como Croacia, el castillo austríaco sufrió una dolorosa derrota (23-27) más por la forma que por el resultado. Y es que ante los croatas, con su tradicional 5-1 y Duvnjak de avanzado, la escuadra que dirige Ales Pajovic se estrelló una y otra vez y sus figuras como Bilik o Bozovic sufrieron para encontrar las redes de la portería croata. En ningún momento dieron los austríacos la sensación de poder batir a los de Lino Cervar, dejando constancia de que, a pesar de la gran evolución del balonmano del país y los varios peldaños que ha ascendido en su juego, todavía está demasiado supeditado a las acciones individuales de sus estrellas. Si estas no encuentran el camino del gol, Austria sufre muchísimo.

El equipo de Jordi Ribera también es especialista en esa defensa 5-1, si bien más profunda al contar con un jugador más dinámico en el avanzado como es Alex Dujshebaev, en lugar del veterano Duvnjak, con mayor altura y envergadura. Pero si a nivel defensivo, España hasta ahora ha mostrado una total solvencia. Sin lugar a dudas será en el ataque donde los de Jordi Ribera puedan sufrir ante la poderosa defensa austríaca.