Balonmano
El Erte ya afecta al Ademar
El conjunto leonés espera que el hipotético regreso de la Liga mitigue el recorte salarial El espaldarazo de Abanca salva el presupuesto de la 2019-20
El Erte ya es una realidad en el Abanca Ademar. La medida, tomada por la directiva del club como mal menor ante la paralización de las competiciones, afectó en un primer lugar a los trabajadores de la entidad y ahora lo hace también a la plantilla y el cuerpo técnico. Un expediente de regulación de empleo que el presidente, Cayetano Franco, confía en que se extienda a lo largo del menor tiempo posible, pero todo dependerá de si la Asobal decide reiniciar la Liga o por el contrario dar por finalizada la 2019-20 tal y como está. En ese caso, el erte no desaparecería, como mínimo, hasta la próxima pretemporada.
Ahora mismo no hay una decisión tomada en firme sobre qué ocurrirá con las once jornadas que aún restan por disputarse. La intención de los máximos responsables de la competición es retomarla en el mes de mayo e intentar que no se alargue más allá de mediados de junio. Pero ya hay numerosos clubes que han pedido que se suspenda definitivamente y que cualquier otra medida será inviable. Argumentan que no es viable disputar partidos más allá del 31 de mayo y que de volver necesitarían además al menos dos semanas de preparación.
Sin embargo, en el Abanca Ademar sí mantienen la esperanza de que la temporada pueda completarse. De momento el erte ha abierto un interrogante en varios jugadores, que piden a la cúpula ademarista que se haga cargo del porcentaje de las fichas que el Gobierno no llegará a cubrir. Pero por ahora no han recibido una respuesta. Sí es un alivio para las arcas del club que Abanca haya anunciado su compromiso de mantener el patrocinio íntegro de esta campaña. Un gesto que sin duda mitigará parte de las pérdidas que van a tener, por ejemplo, por las ventas en taquilla. Y es que aunque regrese la competición en mayo, lo que es seguro es que todos los partidos serán a puerta cerrada.