Más fechas para la temporada

La temporada de pesca en los ríos leoneses transita en sus primeras semanas en clave positiva. El estado de los ríos, la climatología y el alto número de truchas, sin duda alguna el pez estrella, están presentando un panorama que ya se esperaban los aficionados pero que a causa de la crisis sanitaria a causa del coronavirus les impidió sacar la caña y sedal y pisar los cauces hasta finales de mayo. Casi dos meses de retraso que han llevado a un buen número de pescadores a hacer público un deseo, el de que la temporada pueda ampliarse aunque no esos dos meses perdidos sí alguna semana más para que en el casi de la fecha del 31 de julio pueda prologarse (y también en el de otras excepciones que permitían en los ríos controlados alcanzar el mes de octubre).

Por el momento las fechas permanecen inalterables aunque se espera que dada la situación y la posibilidad de que esta actividad también repercuta en el nivel económico de muchas localidades en el aspecto turístico derivado de la pesca, los días puedan verse ampliados en el caso de la Comunidad, y en el concreto de los cientos de kilómetros piscícolas que existen en la provincia leonesa.

También se verían beneficiados os pescadores de otras zonas geográficas ya que el buen estado de los ríos leoneses y su extensión suponen un reclamo importante para aficionados asturianos, gallegos y, como no podía ser de otra manera, del resto de Castilla y León. Pescadores que por eso de no poder trasladarse hasta ahora de una provincia o Comunidad a otra ha impedido que la presencia de estos sea palpable en los principales y más demandados cotos de la provincia.

Ahondando más en las primeras semanas de la temporada de pesca en la provincia leonesa, si por algo han destacado es por el buen bagaje para los amantes de la caña y el sedal. Tanto para los pescadores que prefieren la actividad con muerte como para aquellos que desde hace algún tiempo han visto en la sin muerte una forma más satisfactoria. Precisamente en este segundo apartado cada vez hay más aficionados que se están decidiendo por esta modalidad.

Numerosas truchas y de gran tamaño han sido también parte de estos argumentos en positivo en las primeras semanas de la temporada. Y además en buena parte de los cotos, Arecs y EDS, algo sin duda positivo para los pescadores que han podido diversificar sus jornadas sin tener que centrarse en un lugar a veces altamente demandado que evitaba que alguno de ellos pudiera probar su destreza.

La climatología también ha jugado un factor importante tanto en las fechas previas al inicio (retrasado) de la temporada como durante estas jornadas de mayo (pocas) y junio. Con el agua caída y los caudales más que aceptables el hecho de que el calor haya hecho acto de presencia pero no en grados insoportables ha ayudado bastante. Eso sí, a veces con un tiempo cambiante que aún así ha sido por ahora más benévolo que en ejercicios anteriores y que según las previsiones seguirá esta andadura al menos a lo largo de las próximas semanas. En los cientos de kilómetros pescables de la provincia leonesa.