Consecuencias del confinamiento
El deporte online saca músculo frente a los gimnasios
El deporte online gana adeptos tras el confinamiento a causa del coronavirus, que ha obligado a los gimnasios a permanecer cerrados durante semanas y a reinventarse en su reapertura para no perder a su clientela, incorporando medidas de seguridad como la separación de máquinas mediante mamparas.
"Llegamos a tener a 35.000 personas entrenando online con nosotros cada día", afirma en una entrevista a Efe Paula Ordovás, bloguera dedicada al mundo de la moda que al comienzo de la cuarentena empezó a subir entrenamientos diarios junto con su entrenador personal, Miguel Ángel Peinado, a su perfil de Instagram.
"La gente ha visto que puede hacer un entrenamiento en directo desde casa. Está notando cambios, les divierte mucho y no dependen de un horario porque también pueden entrenar en diferido. Eso les ha enganchado y creo que ha venido para quedarse", argumenta Ordovás, que acaba de estrenar junto con Peinado la plataforma de entrenamiento online Better Naked Club, ya con 5.000 suscriptores.
Otro ejemplo del éxito del deporte online es el gimnasio virtual Wowego, nacido hace tres años pero que en apenas dos meses ha multiplicado por cinco el número de suscriptores, asegura a Efe su fundador y director, Óscar Molina Crivillén.
Esta plataforma, que su director define como el "Netflix del fitness", ofrece "cualquier tipo" de clases virtuales de manera ilimitada mediante una suscripción mensual.
Wowego fue gratuito en la cuarentena durante un mes, y aunque con el inicio de la desescalada esa demanda "atípica" se ha reducido hasta la mitad, Molina Crivillén cree que el modelo online se va a "consolidar" porque "muchos usuarios han descubierto una alternativa asequible y ventajosa".
Las dificultades económicas de los gimnasios
Mientras el deporte online ha crecido y se ha consolidado durante la cuarentena, los gimnasios tienen que hacer frente a grandes pérdidas por el cierre obligado de los negocios, que no han podido reabrir hasta el final de la desescalada.
En los próximos doce meses la facturación de las 4.743 instalaciones deportivas en España podría caer en torno a un 44 por ciento, lo que se traduce en 1.100 millones de euros de pérdidas, comenta a Efe el gerente de la Federación Nacional de Empresarios de Instalaciones Deportivas (FNEID), Alberto García Chápuli.
Advierte de que esta fuerte caída es "lo suficientemente alta" como para impedir la viabilidad del sector, por lo que pide apoyo a las administraciones, tanto en forma de financiación o medidas fiscales, como sobre la demanda, por ejemplo, mediante campañas de concienciación hacia el deporte.
En todo caso, García Chápuli asegura que la reapertura de los centros, que en Madrid fue posible a partir del lunes 22 de junio al 60 por ciento del aforo, ha tenido una acogida positiva por parte de los usuarios.
No le preocupa la creciente demanda del deporte online, que cree que puede perjudicar de manera "momentánea" a los gimnasios ya que, a su juicio, los entrenamientos desde casa son "un complemento", pero no un "sustituto".
Un negocio obligado a reinventarse
En el distrito madrileño de Chamberí está el gran centro deportivo GoFit Vallehermoso, que el 22 de junio abrió sus puertas reinventado con estudiadas medidas de higiene para que sus usuarios se sientan seguros en su vuelta a la actividad presencial.
El adjunto a la presidencia de la compañía GoFit, Alfonso Arroyo, asegura que las sensaciones tras la reapertura están siendo "muy buenas" porque, aunque el regreso es "progresivo" debido a que hay personas que pueden tener "un poco más de miedo", los usuarios que vuelven al centro "cuando lo ven, se sienten seguros".
Marcas y más espacio delimitado para asegurar la distancia física, pantallas de metacrilato entre las máquinas, sistemas de renovación del aire cada siete minutos, puntos de higienización e incluso un programa de predicción de riesgo de contagio son algunas de las medidas puestas en marcha.
Estos cambios han convencido a Natalia, que volvió al gimnasio el día de la reapertura "con un poco de miedo" pero ahora está "muy contenta".
Lo mismo le pasa a Daniel, a quien le costó un poco regresar al gimnasio pero que ahora afirma que no lo cambiaría por el deporte online porque le "ayuda más" a la hora de entrenar.
El adjunto a la presidencia de la compañía GoFit cree que la fuerte acogida del deporte online no sustituirá al ejercicio en los centros y que incluso es posible que "fortalezca el compromiso con la actividad".
Por su parte, el director general la gran compañía de gimnasios McFit, Rafael Lillo, opina que los entrenamientos virtuales acabarán siendo algo "complementario", ya que "en ningún sitio se entrena mejor que en un gimnasio".
Reconoce no obstante que la cuarentena ha sido "económicamente devastadora" para el sector de los gimnasios, que a su vuelta ha visto que la asistencia de los clientes ha caído entre un 40 y un 50 por ciento con respecto a hace un año, aunque celebra que la gente que ha vuelto lo haya hecho "ilusionada".
"Según van pasando las semanas, hay cada vez más socios que vuelven al gimnasio, en el momento en el que vuelven y ven todas las medidas de higiene, se sienten más seguros e incluso sorprendidos", asegura esperanzado.