Una liga de transición para clubes «más profesionales» que defiende la Cultural
La Cultural lleva meses apoyando la creación de lo que se ha venido a llamar Segunda B Pro, una competición intermedia entre Segunda y Segunda B que entrará en vigor a partir de la 2021-22 y cuyo principal objetivo es incorporar equipos saneados a nivel económico que sean los que realmente aspiren a recuperar el fútbol profesional.
Desde la llegada de Aspire al conjunto leonés la deuda histórica del club, que a punto estuvo con hacerle desaparecer, fue subsanada por completo iniciando una etapa donde la solvencia económica ha sido, sin duda, el denominador común. Los éxitos deportivos no han terminado de acompañar, pero ahora mismo es de los clubes españoles de la categoría con mayor músculo financiero. Diferenciarse de los que, por contra, no están al día en los pagos a empleados e instituciones es lo que lleva a la Cultural a apostar por esta nueva competición creada por la Federación Española de Fútbol.
Pero para ganarse el billete, en caso de que no ascienda la temporada que viene, tendrá que realizar una buena primera fase de la próxima liga. Si no, se verá abocada a una Segunda B que en realidad no será otra cosa que una Tercera División encubierta que puede acabar con todos los objetivos deportivos y sobre todo con la paciencia de la academia catarí, quien, como adelantó este periódico, busca nuevos socios que o bien se queden con el club o al menos inyecten una suma importante de capital. Un socio que de momento no terminan de encontrar.