Simeone y Luis Suárez unen sus caminos... de rojiblanco
El entrenador argentino y el delantero uruguayo estaban llamados a compartir club por sus características futbolísticas
Cuando Luis Suárez aterrizó en el FC Barcelona en el verano de 2014 lo hizo bajo sospecha. No solo porque estaba sancionado por la Fifa por el mordisco a Chiellini en el Uruguay-Italia del Mundial 2014 y no pudo debutar hasta noviembre, sino también porque había muchas dudas sobre el encaje de su estilo brusco en la delicada filosofía azulgrana.
Ya por entonces no fueron pocos los que entendían que el matrimonio ideal del charrúa era con el Atlético de Diego Pablo Simeone, que ya había mostrado interés, no con el conjunto azulgrana que comenzaba a liderar Luis Enrique, quien, aunque menos refinado que Pep Guardiola, mantenía en la plantilla a ‘tocadores’ como Iniesta y Xavi Hernández que no pegaban con Suárez ni en pintura. Hasta parecía, ironías del destino porque acabó siendo su mejor amigo, que sufriría al lado de Leo Messi,. El mordisco de Suárez y el pisotón de Simeone (a Julen Guerrero, por ejemplo) sí casaban. Pues bien, nadie podía adivinar entonces el gran rendimiento de Luis Suárez en el Barça durante seis temporadas, pero al final sí se producirá esa sociedad con Simeone. No iban los ‘adivinos’ tan desencaminados.
El uruguayo se va del Barça como tercer máximo goleador en la historia del club. Solo Messi y el mítico César le superan. Pero nada de eso pudo ocurrir si en 2013 el Atlético hubiese tenido el músculo económico de ahora. Luis Suárez destrozaba redes en el Liverpool cuando Simeone lo vio como pieza ideal para su proyecto. Ahora ya lo tiene a sus órdenes.