«Con Khalifa formamos una de las mejores parejas de porteros de la Liga»

Aprendió español en un mes, casi tan rápido como asimilaba que el hacerse con un hueco en la portería del Ademar no iba a ser tarea sencilla. Guijosa le reseteó. Le explicó que el balonmano que había jugado hasta la fecha en su Croacia natal no le servía absolutamente para nada si aspiraba a la élite. Con Cadenas se ha hecho un hombre. Hoy es el jugador más en forma del equipo. No teme el fichaje de Khalifa, le motiva. Acaba contrato con el club esta temporada y que se decante por seguir dependerá mucho de su entrenador y de la directiva.

—La opinión general dentro y fuera del club coincide en que ahora mismo estás siendo el jugador más determinante. ¿Cómo lo valoras tú a nivel personal?

—Hemos ganado los tres primeros partidos de Liga y contra Cuenca caímos porque no estuvimos bien en defensa, sobre todo en la segunda parte. Ellos tuvieron muchos tiros desde los siete y ocho metros, lanzamientos que resultan muy complicados para un guardameta. Obviamente a nivel personal estoy muy feliz. Entrené durante todo el verano en Croacia con dos preparadores, uno para lo físico y otro de porteros. Es muy difícil volver a las pistas después de seis meses de parón. Por ahora estoy muy feliz con mi rendimiento pero la temporada será larga con la Liga, las copas y la competición europea.

—Fue Rafa Guijosa quien insistió en tu fichaje hace tres temporadas. ¿En qué ha cambiado aquel Slavic con el que ahora es titular indiscutible en la portería del Ademar?

—Estoy muy agradecido a Rafa por haberme dado la oportunidad de jugar en el Ademar. En Croacia la liga tiene un nivel inferior a la española y necesité entre dos y tres meses al llegar para asimilar las tácticas y los sistemas de juego. Sí noté una mejoría en un primer lugar en lo físico y ahora se podría decir que en todas las facetas, también en lo mental. También el entrenar con Cadenas me ha hecho crecer porque vive el balonmano, le gusta mucho hablar de lo que hacen los mejores porteros del mundo y tratamos de ponerlo en práctica.

—Ya compartiste vestuario con un referente como era Nacho Biosca y ahora el club ha fichado a Khalifa, que sabe lo que es ganar una Champions. ¿Te preocupa tener tanta competencia o es una motivación?

—La llegada de Khalifa supone una motivación más para mí. Necesito entrenar y jugar mejor porque todos los profesionales del mundo quieren ser titulares en sus equipos.

—Pero ¿tienes miedo de perder la titularidad?

—No tengo miedo. Cuando jugaba en Croacia tenía un portero más joven de compañero y sabía que yo acabaría jugando sí o sí. Aquí todo es diferente, cada día necesito mejorar para ser titular.

—¿Sois la mejor pareja de porteros de la Asobal ahora mismo?

—Por ahora creo que sí, pero, como dije antes, la temporada es muy larga y llevamos solo cuatro partidos oficiales.

—¿Qué cualidades te diferencian del exguardameta del Vardar?

—Él es un gran portero, mucho más alto y yo quizá destaque por ser más explosivo. Creo que entre los dos hacemos una gran pareja.

—¿A qué achacas que el equipo esté defendiendo mal en este inicio de temporada?

—Tenemos un grupo muy joven con muchas incorporaciones. Están Piechowski, Semedo y Kisselev que necesitan tiempo para adaptarse y dar lo mejor de sí.

—La afición está volcada contigo...

—Eso me hace muy feliz, pero lo importante no es si yo estoy mejor o peor sino el hecho de ir acumulando victorias. Ahora contra Granollers y Bidasoa no importa quién de mis compañeros sea la figura sino que sumemos los puntos de dos en dos.

—¿Hay alguno de los nuevos fichajes que te hayan sorprendido por su calidad?

—Bueno, a Semedo y Natán ya les conocía porque nos hemos enfrentado a ellos cuando estaban en Anaitasuna y Cuenca. Me sorprende para bien Piechowski.

—Pero quizá todavía no se ha visto su mejor nivel...

—Claro, porque él necesita adaptarse a sus nuevos compañeros y el cambio es muy grande. Necesitamos tiempo todos.

—Hablas de tiempo, pero el calendario de esta temporada no concede muchos tropiezos. De hecho ahora aguardan dos rivales directos en solo cuatro días.

—Es cierto, pero así es el balonmano. Ahora tenemos dos partidos muy difíciles con largos viajes. Vamos a ver qué pasa.

—¿A ti te personalmente te costó mucho adaptarte al equipo y a la ciudad?

—Al principio sí, sobre todo por el idioma, pero desde el primer día Jaime (Fernández), Carrillo o Gonzalín me pusieron las cosas más fáciles, me ayudaron en todo. Hoy, después de dos años y pico en León, puedo decir que tengo grandes amigos aquí.

—Acabas contrato con el Ademar este año. ¿Te gustaría renovar o consideras que es el momento de dar un salto a otro equipo de mayor nivel?

—Estoy feliz en el Ademar, entre otras cosas porque entrenamos a un alto nivel y además estoy jugando, que eso es muy importante para un portero. Pero no lo sé, vamos a ver qué ocurre en los próximos tres o cuatro meses también con la situación del coronavirus, que ha dañado la financiación del club. Necesito hablar con la directiva y con Manolo (Cadenas).

—¿Pero va a depender más del aspecto deportivo o del económico?

—Como club estoy feliz aquí pero es pronto para tomar una decisión. Quiero saber qué planes tiene la directiva y también el entrenador.

—Y en el futuro, ¿qué aspiraciones tienes?

—Por ahora no lo sé, porque lo único importante para mí es estar cada vez mejor en cada entrenamiento. No miro más allá. Solo pienso en el partido que viene y en ser mejor portero.

—Croacia disputará el Mundial de Egipto del próximo mes de enero. ¿Defenderá Dino Slavic la portería de la selección absoluta por primera vez?

—Es una buena pregunta, pero yo no tengo la respuesta (risas). Espero estar entre los convocados, pero se verá. Y como comenté, solo pienso en mantener mi nivel en la portería del Ademar y veremos qué es lo que pasa.

—Hay grandes porteros croatas. ¿Quiénes consideras que son tus rivales a la hora de entrar en la lista de convocados?

—Están Marin Sego del Montpellier e Ivan Pesic del Meshkov Brest, entre otros.

—¿Alguna vez te ha llamado el seleccionador nacional para decirte que cuenta contigo?

—No, hasta ahora no.

—Hay varios exjugadores del Ademar que han denunciado al club por lo que ellos consideran despidos improcedentes y parece que todo se decidirá en los tribunales. ¿Ha perjudicado eso al vestuario?

—No, el vestuario ha hecho un gran grupo, no tenemos ningún problema entre nosotros ni dentro ni fuera de la pista.

—¿Crees que la salida de Mario López ha debilitado al equipo?

—Sí, porque Antonio es todavía muy joven y necesita mucho tiempo aunque calidad tiene de sobra, lo mismo que Lodos. Los juveniles del Ademar tienen un gran equipo y muchos llegarán al primer equipo en dos o tres años.

—¿Preferías una Liga regular o que se hubiera dividido en dos grupos?

—Tal y como están las circunstancias con el coronavirus hubiera dividido la competición en dos grupos porque ahora hay problemas para disputar las jornadas que se suspenden. Mira Logroño, solo ha jugado dos partidos. A nivel físico nosotros aguantamos bien el ritmo de encuentros, es solo por no quedarse sin fechas.

—Siempre se habla de un Ademar ganando títulos pero mientras esté el Barcelona suena a utopía...

—Es muy difícil y encima tienen mejor equipo que el año pasado. Pero nosotros no nos rendimos nunca.