Toca guardar la caña y el sedal

Buen balance a pesar de que en este 2020 faltaron dos meses, los que el estado de alarma provocado por el covid impidieron la práctica de la pesca en los ríos leoneses. Con esas menos fechas que se espera sean una anécdota para el próximo año, los pescadores tenían hasta ayer la oportunidad de probarse con la caña y el sedal en los cientos de kilómetros de masas de agua en sus diferentes especificaciones. Hasta agosto en los ríos no regulados y este mes en los regulados, los últimos en ‘cerrar’ una campaña que a pesar de la incertidumbre inicial ha tenido un desarrollo normal en líneas generales.

Y con un buen número de truchas poblando los ríos. Sólo el habitual tramo de estío que con caudales bajos ha hecho que muchos lugares que la pesca se haya convertido en un ejercicio de mucha paciencia y a veces con resultados adversos ha ejercido de nota discordante a unos meses que como viene siendo habitual en los últimos ejercicios han caminado de la mejor manera posible.

Incluso en las últimas semanas donde los caudales han vuelto a subir la situación ha sido óptima para aquellos que han querido apurar los últimos días para practicar su pasión.

Toca para muchos tener que guardar la caña y el sedal. Otros, los que también prueban suerte en el lago, podrán, si la situación lo permite, poder practicar en esos escenarios aunque todavía tendrán que esperar unas fechas.

Lo que sí queda claro es que la afición a la pesca y el número de practicantes es cada año importante situando a la provincia como un referente nacional. Justo en un año en el que las competiciones oficiales han quedado en un segundo plano teniendo que aplazarse gran parte de ellas. En este torneos como Nacional, europeo y Mundial, ha puesto el cartel de aplazado a la espera de que en 2021 la situación originada por el covid permita su desarrollo y con ello a los pescadores leoneses demostrar su calidad. Provinciales y Autonómicos si han tenido cierta presencia pero siempre condicionados por un panorama que también ha marcado el devenir de la pesca, aunque no en una pasión que a pesar de tener que retrasar su puesta en escena casi dos meses, ha visto como en apenas unas jornadas alcanzaba un rendimiento elevado.

Y prueba de ello son los resultados y sensaciones que ha dejado en los pescadores que ya miran al próximo año con el reto de que discurrir sin contratiempos y que además cuente con una normativa a la que se introducirán algunas novedades.

En algunas como la extensión en determinados cotos de la pesca sin muerte que cada año va ganando más adeptos hasta el punto de convertirse ya en una práctica bastante aceptada.

Estas novedades tendrán su reflejo a lo largo de las próximas semanas para empezar a marcar el libro de ruta de la próxima campaña justo cuando la actual acaba de bajar el telón en los cientos de kilómetros de ríos leoneses.

Y con perspectivas también en clave positiva siguiendo el paso de los últimos ejercicios en los que la climatología, los caudales y otra serie de condicionantes han jugado en líneas generales a favor de la pesca en la provincia.