El Cleba paga la falta de competición (23-28)

De menos a más. Así arrancó el Rodríguez Cleba su encuentro frente al Hand Vall en el Palacio de Deportes. Las de Juan Moreno debutaron al fin esta temporada tras tres suspensiones a causa de la pandemia de Covid. La mala noticia es que no pudieron con un Hand Vall que las superó en todo. Físico, juego, ataque y defensa (23-28).

Costó coger ritmo ante las pucelanas, mucho mejor plantadas tanto en ataque como en defensa. El 1-4 en los primeros minutos hizo ver que la falta de ritmo competitivo de las leonesas se iba a notar. Siempre por detrás en el marcador, solo Cristina Viñuela pareció tener la clave del gol, sobre todo desde los siete metros.

Pero el tercio final del primer acto igualó las cosas, con velocidad en las contras y una defensa más ajustada. Ayudaron también las paradas de Bárbara y casi con el tiempo cumplido el Cleba colocó un tranquilizador 11-11.

Otra historia muy diferente fue la segunda mitad, donde un eléctrico Hand Vall rompió el partido en apenas cinco minutos. Las visitantes abrieron brecha a base de contras veloces, dejando en evidencia las lagunas atrás del Cleba. Ania se sumó al aspecto golpeador desde el extremo pero las vallisoletanas tenían el choque donde querían.

Un Rodríguez Cleba al tran tran no sirvió para inquietar en el marcador a su rival, que no bajó la intensidad en ningún momento. Mucho que mejorar le queda a un Cleba que pide refuerzos a gritos si lo que quieren es luchar por el ascenso.

Lo mejor es que aún es el primer partido y las de Moreno tienen margen enorme de mejora.