Balonmano | Liga Asobal
El covid pone en jaque al Ademar
El positivo no concluyente de Jaime Fernández obliga a toda la plantilla a hacerse nuevos test
Como Bill Murray en Atrapado en el Tiempo . Así vive desde el pasado mes de septiembre el Abanca Ademar. Un eterno ‘día de la marmota’ provocado por el covid-19 que ayer obligó al club a pedir el aplazamiento del partido ante el Huesca y que amenaza con imponer otro confinamiento a la plantilla justo en un mes donde debía afrontar siete partidos. Todos esos encuentros —sobre todo Logroño (mañana) y Metalurg (próximo martes)— están ahora mismo en el aire a la espera de que la plantilla se realice hoy nuevos test PCR.
El positivo no concluyente de Jaime Fernández ha hecho saltar todas las alarmas. El extremo leonés —junto con Rubén Marchán— formó parte de los seleccionados por Jordi Ribera la anterior semana para representar a la selección absoluta de balonmano. De esa concentración han salido varios positivos como el lateral del Vezsprém húngaro Jorge Maqueda y el extremo Kauldi Odriozola del Bidasoa Irún. Mientras que el pivote del Abanca Ademar daba ayer negativo en las últimas pruebas, Jaime podría tener el virus o haberlo pasado ya y quizá contar con anticuerpos. Ambos jugadores llevan entrenando junto al resto del conjunto ademarista durante varias sesiones esta semana y por ello todos se someterán a nuevas pruebas hoy.
Hoy podrá ser peor
El conjunto de Cadenas ya cuenta con cinco partidos de Liga y uno de Europa aplazados
El club comunicó a media mañana de ayer su decisión de no emprender viaje a Huesca para evitar males mayores solicitando a la Federación Española de Balonmano el aplazamiento del encuentro correspondiente a la duodécima jornada de Liga. Petición que poco después hizo efectiva el comité de competición del máximo órgano federativo. Con este son ya cinco los duelos ligueros que tiene pendientes el Ademar —más otro de Europa— y si se confirma el nuevo confinamiento del equipo la situación se volverá dramática.
En un calendario sin apenas respiro, cada vez que se acumulan suspensiones se antoja más complicado encontrar fechas libres. El Bidasoa-Ademar de la primera jornada ya se ha visto aplazado en dos ocasiones y la tercera —19 de noviembre— está casi confirmada. La Copa Asobal —prevista para los días 19 y 20 de diciembre en Santander— se retrasa a 2021 liberando un fin de semana donde no solo los leoneses sino el resto de clubes podrán recuperar al menos un encuentro. Pero lo cierto es que la sombra de un cambio de sistema de competición planea cada vez con más fuerza sobre todos los integrantes de la Asobal. Mientras la pandemia no dé un respiro parece complicado que los contagios de jugadores desciendan y terminar la Liga de 34 jornadas suena a utopía.