El mejor centenario para Bolo sería celebrar su 43 victoria

Jon Andoni Pérez Alonso, Bolo en el mundillo futbolístico, se convertirá este domingo en centenario en el banquillo de la SD Ponferradina, algo que no pasada desde que lo hiciese otro destacado ex delantero como fue Claudio Barragán. De hecho, ambos son los dos únicos desde que Silvano es presidente y los dos últimos en la historia de la Deportiva que han iniciado una tercera campaña en el banquillo berciano. Y Bolo tiene contrato hasta finales de la temporada 2021-2022.

El 31 de mayo del 2018 Bolo se convertía en nuevo técnico de la Deportiva en sustitución de Carlos Terrazas. Días después era presentado. El objetivo, pelear por el ascenso después de dos años aciagos en Segunda División B. Y como había hecho en sus años anteriores en el banquillo del Arenas Club, cumplió el objetivo y devolvió a la escuadra berciana al fútbol profesional con un play off espectacular, mejorando incluso el que había hecho Claudio en el 2012 y a la par, salvando las distancias de tiempo y categoría, al de la temporada 1998-1999 con Jesús Tartilán para volver a Segunda División B tras cinco temporadas en Tercera División.

El mejor resultado en esa primera campaña fue el 5-0 que le endosó la Deportiva en la parte final de la primera vuelta a un endeble Real Valladolid Promesas.

La pasada temporada también logró el objetivo, aunque de forma sufrida. La permanencia llegaba en la penúltima jornada ante la UD Almería después de una racha de cinco derrotas seguidas y un punto de dieciocho posibles que pusieron a la formación berciana contra las cuerdas. Pero lo cierto es que salvo en las dos jornadas iniciales, nunca ocupó plazas de descenso. La foto del abrazo entre Bolo, Silvano y Yuri al final de este choque es ya historia del deportivismo.

En su tercera temporada, de nuevo el reto de la salvación. El inicio también fue con una derrota, como la pasada campaña, pero la formación berciana ha estado la mitad del primer cuarto liguero en puestos de play off de ascenso. Quizá ahora atraviesa su momento más delicado de lo que va de competición. Ha ganado cinco partidos y perdido seis. El balance quiere igualarlo con un triunfo que permitiría al preparador vizcaíno cumplir 100 partidos en el banquillo blanquiazul con una victoria y una sonrisa.

Bolo reconoció ayer en Onda Bierzo que tuvo una oferta del Rayo Vallecano para entrenar esta temporada al equipo en el que triunfó como futbolista, pero que decidió seguir en la Deportiva: «Estoy muy a gusto aquí y creo que aún puedo hacer muchas cosas. Todo el mundo sabe que soy rayista, pero creo que en el futuro tendré la oportunidad de dirigir a ese equipo y el presente está en Ponferrada y en la Deportiva, en donde estoy muy feliz. Además, este año tengo a mi familia conmigo, pues en los dos anteriores estuve solo».