Juanín aportó tres goles a la clasificación de España

Hombrados, Ugalde (1), Masip (2), Mariano Ortega (3), Garralda (5), Juancho Pérez (1), Carlos Ortega (1), -equipo inicial-, Prieto (1), Juan García (3), Dujshebaev (5), Hernández (4), Entrerríos (2), Romero (-) y Barrufet (p.s). AUSTRIA (10+13): Huemer, Folser (3), Gierlinger (-), Graf (4), Kainmuller (1), Varga (1), Schlinger (-) -equipo inicial-, Abadir (-), Kopeining (-), Galic (9, 1p), Stachelberger (-), Szlezak (5, 1p) y Binder (p.s). ÁRBITROS: Vakula y Ljudowik (UKR). Excluyeron a Mariano Ortega, a Carlos Ortega, Garralda, Juanín García, Graf, Szlezak y Varga (2). MARCADORES PARCIALES: 2-0, 4-1, 7-5, 9-6, 11-8, 14-10; 16-12, 21-12, 22-15, 24-19, 25-20 y 28-23. INCIDENCIAS: Encuentro de vuelta de la eliminatoria de clasificación para el Mundial de Portugal 2003 disputado en el pabellón Blancadona de Ibiza ante unos 2.000 espectadores. España se apartó de las inesperadas sorpresas y selló su clasificación para el Campeonato del Mundo Portugal 2003 después de plasmar su evidente superioridad ante Austria, que asimiló y aceptó la supremacía del conjunto de César Argilés y centró sus esfuerzos en alimentar la buena imagen ofrecida en el encuentro de ida. El bloque hispano afrontó el duelo con cierta comodidad después de arrancar dos goles de renta del primer partido. España no pisó el acelerador. Ni siquiera aprovechó la sequía goleadora de su rival, que tardó diez minutos en batir a Hombrados. Para entonces, el equipo de Argilés ya aglutinó una diferencia de cuatro goles, una excelente plataforma de lanzamiento para consolidar una cómoda y estable renta. Alternativas Sin embargo, el partido transcurrió entre intercambio de tantos en ambas metas. La exclusión de Mateo Garralda dio oxígeno a Austria que, de la mano del central de origen croata Darko Galic, limitó las distancias a un solo gol. La selección española apretó en las puertas del descanso y su acierto permitió a los jugadores de Argilés abandonar provisionalmente el encuentro con una diferencia notable. La variante defensiva establecida por el técnico hispano quebró definitivamente el partido en la reanudación.