KICK BOXING
Ciézar fue profeta en su tierra
La velada de kick boxing que se celebró en el Pabellón Municipal de Deportes de Ponferrada el pasado viernes coronó a Rubén Ciezar como campeón de España ante su afición, que lo llevó en volandas a lo largo de su combate. La noche co
Alrededor de setecientos aficionados se dieron cita en el Pabellón Municipal de Deportes de Ponferrada en la noche del viernes para ver como Rubén Ciézar, el púgil leonés afincado en la capital del Bierzo, se alzaba con el Campeonato de España de kick boxing de los pesos supermedios. El combate de Ciézar estuvo precedido por cuatro de exhibición, de los cuales el ponferradino Manuel Gómez venció el primero a los puntos y en el segundo el cántabro Roberto Gómez se llevó el gato al agua por K.O. cuando apenas se llevaba un minuto de combate. Su rival, el local Rubén Lagares, dio el susto de la noche al quedarse inconsciente durante unos minutos, aunque finalmente abandonó el ring por su propio pie. Los otros dos combates, que enfrentaban a Vicente España y Richard Fernández por un lado, y a Sergio de la Cuesta y David Arienza por otro, se saldaron con sendos nulos. Ciézar, arrollador Entonces llegó el gran momento de la noche. Rubén Ciézar y el murciano Pedro Jiménez se disputaban en título nacional de los pesos supermedios, vacante desde que el actual campeón se alzara con el Campeonato de Europa. Ciézar comenzó el combate como un auténtico ciclón, dejando claro desde el principio que quería acabar con su rival por la vía rápida. Sin embargo, como reconocía el propio Rubén al término de la pelea, Jiménez, invicto hasta ayer, era un contrincante duro que no le puso las cosas fáciles y le obligó a agotar los cinco asaltos para llevarse el cinturón. Ciézar no se conforma con el campeonato de España y tras su pelea anunció que a finales de año se lanzará al asalto del título continental. Eso sí, antes defenderá el título nacional en Ponferrada.