Los equipos africanos se estancan en la Copa del Mundo

El fútbol africano, la cantera en desarrollo más barata del mundo, se cotiza al alza. Hace unos años no contaba para nada y ahora se le respeta, aunque su palmarés en la Copa del Mundo sigue siendo muy pobre, insignificante. Además, en los últimos mundiales parece que se ha estancado. En dieciséis ediciones, el mejor puesto es el séptimo que logró Camerún en el Mundial de Italia 90. Por historia no hacen temblar. En el Mundial de Corea y Japón los representantes este continente han decepcionado. Sólo la debutante Senegal está cumpliendo una actuación digna, mientras que Sudáfrica, Camerún, Nigeria y Túnez no han superado la primera fase. Senegal se ha convertido en la revelación del Mundial, con un fútbol fresco, ágil, veloz y un sistema de contragolpe que hace mucho daño a los rivales. La mejor prueba de ello la dio en el partido inaugural donde ganó al vigente campeón, Francia, en lo que hasta ahora es la mayor sorpresa. Confirmó después que no era flor de un día cuando empató con Dinamarca y Uruguay.