Alemania y Brasil llegan de rebote a la final

Pero como es el Mundial de las sorpresas, Alemania y Brasil protagonizarán la final del próximo domingo en Yokohama. Brasil es el único país que ha participado en todas las fases finales de la Copa del Mundo. Sin embargo, su concurso en Corea y Japón corrió muy serio peligro. La ''torcida'' brasileña se llegó a ver fuera del Mundial asiático. Su selección estaba al borde del precipicio cuando faltaba una jornada de la Liga sudamericana. Pero la victoria ante Venezuela le dio el pasaporte para la Copa del Mundo. La angustiosa clasificación ''quemó'' a dos seleccionadores, Wanderle Luxemburgo y Emerson Leao. Necesitó un tercer técnico, Luiz Felipe Scolari para ir a Corea y Japón. Nada menos que 60 jugadores han sido utilizados en los 18 partidos de que constó la Liga sudamericana. Prueba del desconcierto y agobio que se vivía en la selección ''canarinha''. Todo ello para quedar tercera, tras Argentina y Ecuador, y con los mismos puntos que la cuarta, Paraguay. Brasil perdió seis partidos y empató tres. Vamos, un desastre que tuvo solución feliz sólo al final.La clasificación de Alemania no fue menos dramática. Cuando tenía el pasaporte mundialista en la mano sufrió la gran humillación en Munich (1-5) ante Inglaterra que la dejó muy tocada. Como segunda de su grupo la selección germana tuvo que disputar una repesca, ante Ucrania, que solventó con una clara victoria. Por fin Alemania, el segundo país con más participaciones mundialistas, respiró. Pero la selección que entrena Voeller generó todo tipo de dudas, por su mal juego y estilo decadente. Nadie confiaba en ella, empezando por los mismos alemanes. La base del equipo nacional germano la formaba el Bayer Leverkusen, un conjunto con la etiqueta de perdedor, que en sólo quince días se dejó escapar los tres títulos a los que aspiraba, incluida la Liga de Campeones ante el Real Madrid. Se unió la derrota en la final de la Copa de la UEFA por el Borussia Dortmund, otro equipo que aporta varios jugadores a la selección alemana. Derrotismo alemán El fútbol alemán se deslizaba por una pendiente derrotista antes del Mundial. Además, unas fechas antes sufrió las lesiones de jugadores importantes: Scholl, Novotny, Zickler, Deisler, Heinrich, Wöms... Alemania no aparecía en los primeros puestos de las apuestas. No inspiraba confianza. El presidente de la Federación alemana llegó a manifestar que «sería un éxito llegar a cuartos». El vicepresidente Beckenbauer fue más pesimista: «El fútbol alemán está deprimido; no merecemos estar entre los favoritos». Alemania no estaría entre los favoritos, pero está en la final.