Esta Ponferradina va bien

Las comparaciones son odiosas, pero también inevitables y más en el mundo del fútbol. El primer envite amistoso de la pretemporada ha servido para contrastar el actual plantel confeccionado por los técnicos de la Deportiva y sacar conclusiones de cara a lo realmente importante, que es la Liga. De entrada, aunque esto ya se veía en los entrenamientos, parece ser que la portería va a estar bien cubierta y eso que el miércoles Álvaro Iglesias cometió un error de libro en el segundo tanto de los pucelanos, si bien no fue el responsable único en ese gol. La zaga dejó entrever algunas lagunas que deben irse corrigiendo de cara al futuro. La cobertura, por cierto, es la única línea del equipo que estuvo integrada por jugadores que ya estaban el año pasado porque Carlos Aira aún debe mejorar su condición física. En cuanto a la línea medular hay aspectos que invitan al optimismo. Todo el mundo veía con recelo la marcha de Vicente Fidalgo, pero se ha podido constatar que su ausencia está perfectamente cubierta, sin entrar en demasiados detalles. Sigue Arcadio y llegaron dos hombres como Igor y Villa, capaces de hacer olvidar al pelao. La Deportiva ha ganado en intensidad en esa zona y además gana un hombre más porque ahora Simón cuenta con tres para elegir, cuando antes la falta de Arcadio o el propio Fidalgo ya suponía un quebradero de cabeza. Pero con ser importante todo eso, aún es más positivo el fútbol que ahora se puede generar en las bandas. Mangas ya era conocido y por eso extraña menos su capacidad para penetrar y servir desde la derecha. De Lanza había menos referencias, pero el cordobés demostró que puede ser un hombre importante por la izquierda, aunque Simón sigue reclamando refuerzos porque es peligroso contar sólo con Fuentes y el propio Lanza como efectivos específicos para esa demarcación. Arriba hay una pareja de garantías. A Panadero ya se le conoce y es una alegría comprobar que sigue trabajando como siempre. Si Alejandro es inteligente, puede sacar mucho partido de las envidiables condiciones del andaluz, que gana casi todo por arriba. Si a esto se une que están en la recámara gente como Cascallar o el mismo Quiroga, la cosa es más gratificante. Sería injusto olvidarse del resto, pero en teoría jugadores como Gatti, Toñín, Gonzalo y compañía, están llamados a protagonizar un papel secundario. Pero esto es muy largo y todavía no ha hecho más que empezar.