Tiger Woods toma posiciones para llevarse su tercer US PGA

La segunda jornada de la 84 edición del PGA de Estados Unidos, último torneo de Grand Slam de la temporada, terminó por fin ayer sábado tras dos días accidentados, con diversas suspensiones y retrasos debido a la malas condiciones climatológicas. Y terminó bien para Tiger Woods, que pese a verse afectado por la suspensión de su segunda vuelta el viernes a falta de dos hoyos, acabó con otro birdie al 18 para acercarse un poco más a los líderes, que eran cinco. Los primeros tras el segundo recorrido eran los americanos Calcavecchia, Justin Leonard, Beem y Funk, y el surafricano Goosen, que se coló en el grupo de cabeza y a quien parece que se le dan mejor los grandes americanos que los europeos. Tiger Woods, número uno del mundo y vencedor en dos ocasiones en este torneo (1999 y 2000), hizo honor a su condición de favorito y tras dos días de competición ya se colocó en sexta posición a sólo dos golpes de sus rivales. Una diferencia insustancial para el afroamericano, que pese a no estar realizando un golf brillante, con consistencia y solidez está avanzando con paso lento y seguro hacia el que sería su tercer PGA. Los españoles, retrasados Los que sí sufrieron para mantenerse vivos en este torneo fueron Sergio García y José María Olazábal. El castellonense comenzó muy bien la segunda vuelta, con tres birdies en los primeros nueve hoyos de su vuelta, pero en los más fáciles terminó con un parcial de 40 golpes, tras cuatro bogeys, un doble bogey y dos birdies. Esos dos birdies le salvaron de no apearse de la competición y seguir, por los pelos, en el torneo, aunque ya con pocas aspiraciones, a diez golpes de la cabeza. En la misma posición se encontraba Olazábal, que el viernes logró terminar su vuelta, que fue casi una historia calcada del día anterior: apenas cogió calles y salvó hoyos gracias al approach y al putt, la parte de su juego que mejor está funcionando. El vasco terminó con 75 golpes, cuatro bogeys y un birdie en la segunda ronda.