La selección de Argentina asusta a los rivales
La selección nacional de Argentina ganó el tercer compromiso consecutivo en el Mundial 2002 y certificó su pase a la segunda ronda del campeonato invicta al frente del Grupo C por delante de Nueva Zelanda, su última víctima, que le plantó cara durante treinta minutos y en sólo cinco echó por tierra todo el trabajo. Argentinos y oceánicos apartaron la defensa del libreto en el primer cuarto. Un total de 57 puntos entre los dos en equipos en ese tramo son muchos puntos, especialmente para un campeonato del mundo y, por extraño que parezca, en un partido donde estaba en juego la primera plaza del Grupo D. la formación de Rubén Magnano ocupaba el sitio que se le presuponía en los pronósticos. Nueva Zelanda no. Su sitio, en la teoría, correspondía a Rusia, con la que se contaba para liderar el grupo junto al cuadro suramericano, pero la competición ha destapada a una aguerrida selección neozelandesa que ha permutado el papel de comparsa por la primera clasificación de su historia para la segunda ronda de un mundial. La albiceleste, intratable.