Clemente encuentra un atajo

La localidad de la cuenca minera de Guardo acogió en la tarde de ayer la primera cita del mes de septiembre y última de este fin de semana. Pocos luchadores llegaron a citarse para el corro pero lejos de una tarde aburrida, el gran número de espectadores que se trasladó hasta el lugar pudo presenciar una buena tarde de lucha. La categoría de ligeros, la más nutrida para la ocasión con 12 luchadores, tuvo por rubrica final el nombre de Félix Valladares. El líder de este peso tras das cuenta en la previa de Luis Miguel Moro y en los cuartos de final de Diego García, logró billete para unas semifinales que se antojaban a priori complicadas para éste. Santiago Fernández, el rival de Valladares para conseguir llegar a la final, logró dar media caída al de Pallide, pero éste supo sobreponerse y logró dar dos enteras que le metieron en su segunda final consecutiva. Mucho hablan los espectadores de Víctor Oblanca y no es para menos ya que es un gran luchador y ayer lo dejó claramente demostrado. Consiguió llegar a la final tras dar cuenta de David González y de su hermano Javier. Más tarde, ya en las semifinales Álvaro González puso a prueba al pequeño de los Oblanca pero a pesar de ello éste no inquietó a Víctor y logró cómodamente meterse en la final. No estaba para bromas el luchador de Villabalter y consiguió dar media caída al líder del peso pero hasta ahí duró su carrera ascendente ya que Félix Valladares impuso su ley, apretó el motor y con dos enteras logró llevarse el triunfo al cesto. El de Pallide demostró una vez más que difícil va a ser que este año se le escape un nuevo título de campeón de la liga estival. De momento, va camino de conseguirlo.