El sobrino de Nieto aviva la categoría del cuarto de litro

Una caída espectacular, un ansia exacerbada por la victoria y una cerrazón imposible en condiciones normales fueron los condimentos que propiciaron una imagen nunca vista sobre un circuito de velocidad, ya que «Fonsi» Nieto se asió a su moto tal fuerza que en ningún momento la vio alejarse de él. El comprometido punto de la variante del circuito de Estoril, con una pendiente importante no era el mejor momento para irse al suelo, en milésimas de segundo «Fonsi» se dio cuenta de la importancia del momento y agarró con todas sus fuerzas el acelerador, para evitar que el motor de su moto se parase, cuando pudo cogió la maneta del embrague y recuperó el control, comenzaba el espectáculo. Para los más supersticiosos, tal es el caso de su tío, Angel Nieto, un dato importante, «Fonsi» se cayó en la vuelta trece, pero eso no le importó demasiado al madrileño, que desde ese momento protagonizó la carrera más bonita y espectacular que nunca haya realizado en el campeonato del mundo, el fruto, una victoria que además le permite recortar diferencias con su rival. El título todavía está en el aire y cualquier error de los dos puede dejar al otro el camino expedito hacia la victoria final. El rosario de caídas fue espeluznante en esta y en el resto de cilindrada, pero entre todas las de 250 c.c. destacó una en particular, la de Antonio Elías, quien se fue por los suelos hasta en tres ocasiones y una tras otra regresó a la pista, un auténtico ejemplo de pundonor y ganas de aprender bajo cualquier circunstancia, en este caso climática. Enemigo de Pedrosa Quien si falló fue Daniel Pedrosa (Movistar Honda). Una vez más quedó claro que el agua es su acérrimo enemigo. Salía desde una posición privilegiada en Portugal, pero eso fue todo, pues no pudo aguantar ni a sus rivales ni el estado de la pista y pagó su osadía con una caída y un décimo puesto final. Pudo ser peor, pero el campeón sanmarinense, Manuel Poggiali (Gilera), le echó una «manita» al caerse y no poder continuar en las vueltas finales, pues ahora el único que consiguió sumar muchos puntos en su cuenta particular fue el francés Arnaud Vincent (Aprilia), quien demostró una vez más que es un piloto casi infalible bajo la lluvia y ganó de calle a pesar de los intentos del italiano Simone Sanna (Aprilia) por desbancarle en el último giro. Elevar la moral No servía para mucho, salvo para incrementar su moral y lo consiguió, pues Pablo Nieto, antes que su primo «Fonsi», hizo una gran carrera en los 125 c.c. Un dato, en la primera vuelta era vigésimo séptimo y acabó cuarto, concluyente. Bien es cierto que el piloto de Master Aprilia se vio beneficiado por las numerosas caídas, pero en Estoril el primer objetivo de los pilotos no era otro que mantenerse encima de la moto y eso en todas las cilindradas. La lluvia lastró un éxito más contundente.