Ronaldo hace más letal al Madrid

El mejor delantero del mundo aún está lejos de forma, pero en el área es un arma mortal, como demostró frente a una afición entregada que tras lo visto ayer está aún más entusiasmada con Ronaldo, que tuvo su debú soñado y está preparado para hacer más grande al Madrid. Ronaldo resultó decisivo en la segunda parte, pero un impresionante gol de Zidane antes de cumplirse el segundo minuto y un penalti polémico por una caída de Portillo fueron suficientes para que el Madrid se fuese con ventaja al descanso. Cierto es que el Madrid jugó diez primeros minutos de gran fútbol, de verdadero espectáculo, durante los cuales el equipo blanco, con su enorme calidad, y mucha ambición, consiguió encerrar al Alavés en su campo y Zidane logró dejar boquiabierto al Bernabéu. Poco después de que Ronaldo se hubiese sentado en el banquillo, el francés se marchó por velocidad por la izquierda, desbordó a Abelardo, y con su derecha colocó el balón en la escuadra lejos del alcance de Dutruel. El equipo de Del Bosque tuvo después otros ocho minutos primorosos, mientras el Alavés se tenía que limitar a ver cómo el balón pasaba de un jugador a otro del Madrid. Pero pasado ese periodo, el Alavés por fin se estiró, el Madrid aflojó su ritmo, aunque más bien se relajó, y los blancos se echaron atrás para defender el 1-0, con Guti y Portillo muy lejos del área contraria. El Alavés, a pesar de su lentitud, había reaccionado, también cortando el juego con faltas, y con su tremenda presión en el centro del campo no permitió que el Madrid tuviese entonces la pelota y cruzase la diagonal. La presión y la valentía de los vitorianos comenzó a dar sus frutos ante un Madrid poco concentrado, aunque al equipo de Mané le seguía faltando llegada. Penalti polémico Pero llegó la caída de Portillo en el área. Penalti contra el Alavés y 2-0. Sin embargo, al Madrid volvió a fallar en defensa por alto, y después de que Iván Alonso le ganase la partida a Hierro y Casillas respondiese con un paradón, Magno recortó diferencias. El Alavés no sólo no cambió su planteamiento en la segunda parte, sino que se hizo con el balón y el dominio del encuentro, a pesar del toque y la proyección de Zidane. El desafortunado Portillo se había ganado la sustitución por Ronaldo, que salió entonces a calentar, aunque se retrasó su ansiado estreno unos minutos. El Alavés tuvo en sus manos el 2-2, pero Iván Alonso falló el penalti, y por fin salió Ronaldo, aclamado todo el día por el madridismo. Y en el segundo balón que tocó el brasileño marcó el 3-1. Ahí se rompió el duelo. El Bernabéu estaba enloquecido con Ronaldo, que dio alegría a un Madrid en el que siguió brillando Zidane, y el brasileño no tardaría el marcar su segundo tanto.