Mucho premio para poco juego

El Astorga en un flojo encuentro sólo logró empatar ante un Universitario muy serio y bien situado en el campo, donde intentó siempre jugar. Los maragatos se precipitaban en el pase, perdían muchos balones y tenían prisa por marcar y Tejerina, desde la banda, intentaba arreglar los errores que se estaban cometiendo pues no llegaban arriba y eso que el Universitario jugó con un hombre menos desde el minuto 31 por expulsión de Fernando. Sólo cabría destacar en todo este periodo,que se resume especialmente tedioso y largo en cuanto a su desarrollo de cara a las gradas, el envío de un balón al larguero. Poco bagaje para los maragatos que en la segunda parte lo pasaron mal pues los visitantes nunca se escondieron y dieron sobre todo dos sustos al portero Misas. En el minuto 56, se produjo una gran volea de Víctor y Misas, de gran parada, manda a córner; y en el minuto 80 Hugo manda la pelota al poste. Ciertamente, la puntería no era el asunto en el que más afinaba la escuadra foránea, aunque por aquellos momentos, las huestes vallisoletanas eran las que en realidad dominaban con más fuerza el desarrollo del marcador. En definitiva, el Astorga, al final del encuentro, tuvo que conformarse con el empate porque bien pudo ser peor. A la vista de cómo habían funcionado las cosas, habría sido factible que el resultado hubiera sido otro diferente, en tanto en cuanto, los vallisoletanos estuvieron siempre encima, metidos en el encuentro y decididos a hacer cosas más positivas en los siguientes partidos.