«Ha habido problemas insólitos»

-¿Es el planteamiento de la marca o de la empresa el que marca el futuro y la consecución de éxitos? -El presupuesto siempre es importante, pero hay que saber llevarlo a cabo. Hay que saber invertir los recursos y Peugeot ha sabido hacerlo mejor que los demás, como Ferrari en Fórmula 1. Extrapolando las cosas, ha habido muchos años de Ferrari en los que no han conseguido nada y tenían presupuesto. Una de las cosas que ha tenido de bueno Peugeot es que es la marca la que está involucrada en el campeonato y no lo hace a través de un equipo privado, sino que es la propia marca la que está jugándose su prestigio y eso a la larga se nota. -Si siguiera en Ford, ¿qué cree que le faltaría a la marca para triunfar? -No es sólo Ford, ya que detrás de Peugeot están todos muy igualados. El paso adelante de Peugeot ha dejado a los otros en evidencia. Subaru, Ford, Mitsubishi, Hyundai, que ha progresado bastante, o Skoda, han de dar un paso adelante en velocidad, pero es complicado decir dónde está el problema de los perseguidores. Transmisión, suspensiones, motor, aerodinámica, chasis... Es un poco de todo lo que te va alejando de la cabeza. -¿Había visto alguna vez tanta diferencia? -La verdad que nunca había habido una superioridad tan clara. Sobre todo después de Finlandia el dominio de Peugeot ha sido muy grande y eso es preocupante. Cuando se habla de más de medio segundo por kilómetro de ventaja no es fácil reducirla. -¿A Carlos Sainz le pesa la familia para arañar esas décimas? -Hay cosas que me hacen gracia. Si vemos el campeonato del año pasado Burns ganó solo una carrera y fue campeón. Este año corre en el mejor equipo y no ha logrado ganar ninguna. Ganar carreras es difícil como se está viendo. Si el campeón del mundo estando en Peugeot no ha sido capaz de ganar, ya me contarás. -A pesar de luchar por posiciones más retrasadas, ¿se arriesga lo mismo? -Luchar por un cuarto o quinto puesto es como luchar por la victoria. Para mí es lo mismo. Me esfuerzo igual y me entrego igual y arriesgo lo mismo. Lo que pasa que luce menos. Nosotros estamos así todo el rally, y ellos (Peugeot) después de la primera etapa tienen resuelta la carrera. Nos jugamos la vida igual para ser cuarto que para ser primero. Las diferencias entre nosotros son menores y hay que arriesgar más. Entre todos tenemos que cambiar esa dinámica, y volver a los tiempos en que los rallies se decidían en décimas. -¿Qué opina Sainz cuando lee que está acabado? -Leo las cosas y cuando no lo hago directamente tengo gente que se ocupa de ello y me comenta lo que se dice. La verdad es que tengo la conciencia muy tranquila. Hago lo que puedo y lo que sí me molesta es que haga comentarios gente que no ha ido nunca a una carrera y no saben realmente de qué van las cosas. Si la crítica viene de alguien que sabe de qué van las cosas y que sigue las carreras la acepto, pero en líneas generales no me quejo del trato que recibo, ni de la prensa ni del público. Sólo espero que me traten con respeto y bien como siempre he tratado a ellos. Si me tienen que dar un palo que me merezco pues bien, pero hay que informarse bien antes de dar un palo a alguien. -¿Cómo está el futuro de Sainz en el Mundial? -Sigo buscando las mejores alternativas. Existe la posibilidad de seguir en Ford, una posibilidad de ir a Hyundai y poco más. Valoraré cuando tenga que tomar la decisión cuál es la que más me conviene. Ha de ser un proyecto que me motive, y que me sirva de estímulo. Tengo que estar motivado para seguir dando el máximo. Si encuentro algo que me atraiga seguiré corriendo. Si no es así, dejaré de correr. Eso lo vengo diciendo desde hace unos días y estoy preparado para ello. Creo que no dejaré la competición de repente. No es mi idea, pero por el momento no hay un proyecto de hacer sólo unas determinadas carreras. Quizás dentro de dos semanas haya también esta posibilidad, pero por el momento no. -¿En su casa están deseando que no salga nada? -Creo que por un lado cruzan los dedos para que no me salga nada y por otro lado mi mujer sabe que esto es mi vida, mi pasión, y le gusta que esté bien conmigo mismo, y que siga corriendo si ese es mi deseo. Me ve estos días preocupado por lo que pasa porque sabe que me gusta correr.