Álex Gómez decide el derbi

El Atlético Bembibre perdió en su duelo ante La Virgen por un ajustado 0-1, en un partido igualado y en el que el que perdona lo acaba pagando, dadas las innumerables ocasiones rojiblancas que por la falta de puntería o intervenciones del meta leonés Dani, impidieron que el equipo rojiblanco tuviera más premio.

El partido comenzó con una presión local, tímida delante pero intensa desde la mitad para atrás, y con los virginianos, contemporizando sus acciones, pausando el juego y buscando combinar por las bandas. A los ocho minutos, una llegada rojiblanca al área, culminó con un chut forzado de Puente que se desvió por centímetros. De nuevo Puente en el minuto 12 tuvo un mano a mano con Dani que solventó el meta despejando a córner. Siguieron intentando llegar por las bandas los de Nanín, pero con poco acierto. Entró el derbi en una fase de toma y daca, con acciones que no veían puerta, todas las llegadas finalizaban sin éxito y con mucha pelea en el centro del campo. Ninguno de los contendientes era capaz de marcar el ritmo, ya con una batalla en el centro del campo que se convierte en un duelo sin cuartel. En una última acción previa al descanso, una contra de los verdiblancos llega con un gran pase de Gagyk que habilita a Ander, y que solo no puede con una perfecta salida de Ivanildo que tapa todos los huecos, siendo al final, Basalo quién despeje todo el peligro, sacando el esférico lejos de la meta rojiblanca. Una primera parte que transcurrió con sobresaltos para ambas porterías, pero que el mayor peligro lo tuvo el Atlético Bembibre en las botas de Puente.

Tras el paso por vestuarios, Nanín dio entrada a Brítez, Gómez y Chema, sentando a Guti, Gagyk y David, buscando mejorar prestaciones en todas las líneas y velocidad. Se tornó más intenso el juego, ambos equipos buscaban con ahínco la superioridad en el centro del campo, con las defensas adelantadas de unos y otros, el juego discurría en pocos metros, solo cuando se rompía por velocidad por las bandas, se podía llegar con alguna garantía a las inmediaciones de ambas porterías. Dos equipos bien estudiados y que se conocían a la perfección con estilos muy similares, se anulaban en cada ataque. Una llegada visitante decantó el derbi en el minuto 83 con el gol de Gómez.