La Cultural confecciona el próximo plan con reforma total, incluidas las ‘vacas sagradas’
La propiedad de la Cultural, la Academia Aspire, reflexiona y analiza durante estos días la desastrosa temporada de la Cultural, que ni tan siquiera ha entrado en play off, cuando el objetivo era el ascenso a Segunda División. La pésima gestión traerá consecuencias. Aspire busca socio en su inversión o comprador, rebajará de nuevo el presupuesto, variará la gestión, cambiará la plantilla y tocará la política de cantera para que la base tenga cabida por fin en el primer equipo, situación que sólo ha sucedido esta temporada cuando el equipo estaba condenado a continuar en el pozo en el que sigue sumido de la tercera categoría del fútbol nacional. Ni una sola ficha de un jugador leonés, ni de la cantera, tramitada con el primer equipo de la Cultural desde la marcha de Viti al Ucam Murcia hace ya tres temporadas.
La Cultural confecciona el próximo plan con una reforma total, incluidas las ‘vacas sagradas’. Varios futbolistas con contrato en vigor no seguirán en el club de cara al próximo proyecto. La ronda de entrevistas personales ha comenzado. Los jóvenes con contratos bajos en vigor seguirán ligados al club. Son los casos de Samu Diarrá, Lucas Giffard (vuelve del Rayo Majadahonda), Virgil Theresin y Aarón Piñán, que represa del Coruxo tras su cesión. El resto de futbolistas con vínculo contractual lo tienen complicado para continuar en la Cultural. Cristian Galas, Marc Rovirola y hasta Dioni Villalba deben reajustar sus contratos para el nuevo proyecto más austero que se avecina. Mario Sánchez y Carlos Bravo rescindirán. Otros como Julen Castañeda, Éric Montes y Julián Luque entran en los planes del club, aunque no a cualquier precio.
El resto de la plantilla deberá hacer las maletas para buscar acomodo en otro equipo. A Rodas, José Carlos y Toni Abad ya les ha comunicado el club que no seguirán.