«Los clubes más poderosos deben preservar sus intereses»
Felipe Llamazares, uno de los precursores para la creación de la nueva categoría de la Primera División RFEF, junto a otros dirigentes de los clubes más poderosos de Segunda División B (alguno de ellos con serias opciones de subir a Segunda División este próximo fin de semana) exigió hace un año «crear una nueva categoría intermedia entre Segunda División y Segunda División B de 16 equipos para aquellos que no suban, que se podría ampliar a 18 ó 20».
El director general de la Cultural razonó en aquel momento sus planteamientos: «No sólo nos estamos jugando el corto plazo, aquí lo más duro será el medio plazo. Y si entran más equipos se debilitará a nivel crematístico a los equipos económicamente más potentes y a sus inversores», como es el caso de la Cultural de Aspire.
Llamazares insistió: «Este grupo de clubes más poderosos que más han invertido, por encima del millón y los dos millones de euros, deben preservar sus intereses de cara a una posible devaluación», creándose una categoría intermedia entre la Segunda División y la Segunda División B «que permitirían a la Federación Española tener una élite tremendamente interesante y capaz de generar dinero». Las pretensiones del director general de la Cultural de momento no cristalizan.