Fútbol | Play off de ascenso
El sueño se convirtió en pesadilla
El equipo maragato, que llegó a fallar un penalti en el minuto 90, deja escapar una ocasión de oro para ascender a la Segunda RFEF (0-1)
No pudo ser. El sueño de un nuevo ascenso se convirtió en pesadilla y es que el conjunto maragato, que inicialmente lo tenía todo a su favor, vio como una concatenación de acontecimientos acabó con sus aspiraciones.
Parafraseando a Calderón de la Barca en su novela ‘La vida es sueño’ lo acontecido ayer sobre el césped de La Eragudina puede resumirse en ella, ‘y los sueños, sueños son’. El Atlético Astorga deberá esperar a una nueva ocasión para volver a tocar el cielo con los dedos.
La tarde comenzó con un mal presagio para los astorganos porque una fuerte tromba de agua cayó sobre el estadio.
Pese a ello el equipo local gozó de la primera ocasión de gol ante la portería contraria pero el remate de Javi Amor se estrelló en la madera cuando apenas se llevaban ocho minutos de juego.
Mejores ocasiones
Sin embargo, esta situación no amilanó a un conjunto rojillo que venía con un gran baño de autoestima tras haber eliminado a la Arandina a domicilio, pero haciéndolo además con remontada de dos goles en contra incluida.
Tras esta oportunidad los dirigidos por Miguel Ángel Miñambres siguieron controlando el partido, no dando opción a que su rival se creciera, aunque todo ello no tenía reflejo en el marcador ni en ocasiones claras para batir la meta burgalesa, pero poco a poco el juego fue decreciendo.
Superados los primeros veinte minutos el dominio del Atlético Astorga se hace menor porque el Mirandés B nivela la situación, entrando en un constante toma y daca en el centro del campo con las defensas imponiéndose a los ataques.
Taranilla buscó el gol desde varias partes del campo. FERNANDO OTERO
La recta final del primer acto fue protagonizada ya por dos equipos más pendientes de no perder que de ganar lo que imposibilitó que se moviera el luminoso llegándose al descanso con el empate sin goles inicial y con dos contendientes dejándolo todo para la reanudación esperando jugar sus bazas.
Tras el paso por vestuarios dio la sensación de que todo seguía igual. Atlético Astorga y Mirandés B salieron agazapados, esperando su ocasión para sorprender a su rival y encarrilar la victoria.
El conjunto verde parecía más decidido y en los primeros minutos buscó con timidez la portería rival, siendo suyas las escasas oportunidades de gol. La respuesta de los burgaleses llegaba en jugadas de estrategia, pero el luminoso seguía sin moverse.
Pese a ello, el conjunto maragato comenzó a aumentar el ritmo de juego para tomar de nuevo las riendas del choque pero el filial rojillo no había dicho su última palabra manteniéndose a la espera de gozar de su ocasión para superar la eliminatoria.
El Mirandés B comienza a tener más seguridad en sus acciones y a creer que superar otra ronda era posible, empezando a estirarse un poco más hacia los dominios del portero local.
Superado el ecuador de la segunda parte los burgaleses se muestran más atrevidos y son ahora ellos los que pueden adelantarse en el luminoso pero el remate de Pineda se estrella también en la madera como le había pasado al conjunto astorgano en los primeros minutos del encuentro.
Sin embargo, este lanzamiento fue el preludio del gol visitante porque en el minuto 78 el propio Pineda superaba al cancerbero maragato con un remate en el interior del área tras el lanzamiento de un libre directo para colocar el 0-1 en el luminoso de La Eragudina.
Ahora era el Atlético Astorga el que necesitaba un gol para seguir vivo en el play off de ascenso al valerle cualquier empata para superar la ronda al término del partido y su prórroga.
Pese a la desventaja el Atlético Astorga no desfalleció porque aún restaban doce minutos más el tiempo añadido para conseguir lo que hasta ese momento no había sido posible, batir la portería visitante.
Con todo perdido el técnico astorgano toca arrebato para mantener el sueño del ascenso, y como si de una película de terror se tratara, el guión final fue penoso para el Atlético Astorga porque iba a disponer sobre el tiempo reglamentario con la mejor ocasión posible. El colegiado decreta penalti. Diego Peláez es el encargado de lanzarlo pero el meta desvía su lanzamiento, cayendo el balón a los pies de Jorge, que con el meta en el suelo y todo a su favor, envía su remate por encima del larguero. Y aquí se acabó el sueño de una tarde de primavera.
Deportes
La afición del Atlético Astorga no falló y estuvo siempre al lado de su equipo
Roberto Arias