Laporte asienta el muro de España

Nada más el portero Unai Simón, el lateral izquierdo Jordi Alba y el centrocampista Pedri González han jugado tanto como Aymeric Laporte, transformado de debutante a líder del centro de la defensa en una cuestión de veinte días, intocable en esta Eurocopa 2020 para Luis Enrique Martínez.

Al ritmo del ‘tecktonic’, el baile de música electrónica, el pasado miércoles celebró también su primer gol con España, con el cabezazo con el que impulsó el centro de Gerard Moreno al borde del descanso para acelerar la clasificación de la selección para los octavos de final del torneo, donde el lunes ya aguarda Croacia. Ahí apunta a titular de nuevo el central, inamovible de la alineación inicial desde su estreno el pasado 4 de junio contra Portugal, cuando fue reemplazado por unas molestias musculares, porque, de no haber sufrido tal situación, habría jugado el duelo completo, como lo ha hecho a lo largo de toda esta Eurocopa; contra Suecia, contra Polonia y contra Eslovaquia. Y quizá ante Croacia.

Ni siquiera con el error que cometió ante Lewandowski en el 1-1 ante Polonia, cuando el impacto del delantero lo desplazó antes de conectar un remate concluyente sobre la portería de Unai Simón. También fue un central demasiado blando cuando se tiene enfrente un atacante de la talla y la experiencia del goleador de los goleadores de la temporada, que ha cerrado con 55 tantos.

Ni Pau Torres, titular frente a Suecia y Polonia, ha tenido tanto recorrido. Tampoco Eric García, su compañero hasta este verano en el City y que jugó de inicio contra Eslovaquia. Ni Diego Llorente, que aguarda su debut en la Eurocopa. Son los cuatro centrales elegidos por Luis Enrique entre las lesiones y las circunstancias que apartaron a Sergio Ramos e Íñigo Martínez. «Estoy aquí para competir al máximo nivel. Mi objetivo es el mismo que España», proclamó el defensa, al que no le ha pesado la inactividad competitiva final que sufrió en el Manchester City, suplente y sin minutos en nueve de los 13 duelos del último tramo del curso.

Un futbolista idóneo para el estilo de la selección, por su facilidad para salir con la pelota jugada, que se reivindicó además en el 0-5 contra Eslovaquia, no sólo por su gol -o por los cinco que logró el equipo-, sino porque también cerró cada camino a la portería de Unai Simón, que sólo ha tenido que hacer una parada.

Sus 270 pases completados de 274 intentados transforman a Laporte en el segundo futbolista con más entregas acertadas de toda la Eurocopa, nada más superado por el alemán Toni Kroos, que dio 288 de los 314 que propuso.

El porcentaje de éxito del central en esa destreza es de un 89,3 por ciento. A la vez, ha recuperado 14 balones en sus tres partidos con la selección española en la primera fase, sólo por detrás en ese sentido de Jordi Alba, con 19, y de Pau Torres, con 16.