Raquel Suárez: «Estoy en una nube, todavía no me lo creo»

Raquel Suárez González (Villafranca de El Bierzo, 1993) se convertía el pasado lunes en la segunda árbitra berciana en llegar a la máxima categoría del fútbol femenino de nuestro país; a la Liga Iberdrola. Y será la primera como árbitra principal, pues Lidia Lombardero, que llegó antes a la categoría, es árbitra asistente. Los estudios le llevaron a colegiarse en León, por lo que puede dirigir encuentros de equipos como la Deportiva B y al Fabero en Regional de Aficionados, por ahora sólo como asistente, si bien en las próximas horas se conocerá si también asciende a árbitra principal de Regional de Aficionados masculina.

Raquel relata cómo recibió la noticia: «Por la mañana estaba en casa de mi abuela y sonó el teléfono desde un número desconocido. Cuando me dijo que era Undiano Mallenco, supe que había ascendido».

El comienzo en el arbitraje fue casi a los 20 años: «Me convenció mi primo. Al principio estuve a punto de dejarlo, pero ahora pienso que ojalá hubiera empezado antes».

José Luis González González es su referente. «Es muy difícil llegar y quiero trabajar para mantenerme. De hecho, sólo las mejores de cada comunidad optaban al ascenso y de todas ellas únicamente lo hemos conseguido dos», afirma la berciana, para la que el arnitraje significa esto: «Para mí significa todo, el objetivo que llevo persiguiendo muchos años. Es algo por lo que llevo trabajando mucho tiempo y sacrificando muchas cosas para lograrlo». Y tras todo ello va alcanzando sus metas: «En los últimos meses he cumplido muchos sueños: pitar en el Reino de León, luego en El Toralín y ahora el ascenso».

Hay que recordar que recientemente el berciano Omar Álvarez también ascendía a Segunda RFEF.