El central David Alaba sucederá a Ramos con el ‘4’ a la espalda

«Es un número que representa la fortaleza y el liderazgo», proclamó el polivalente defensa austríaco ayer durante su presentación como nuevo futbolista del Real Madrid.

El austríaco, único fichaje de los blancos en lo que va de verano, aterrizó en la Ciudad Deportiva de Valdebebas para vivir una de las jornadas más especiales de su vida. Tras militar durante las diez últimas campañas en el Bayern de Múnich, con el que conquistó 28 títulos y se convirtió en uno de los mejores defensas de Europa, el polivalente jugador se incorpora al trece veces campeón continental con una misión titánica: cubrir el inmenso vacío en la retaguardia que dejó la marcha de Sergio Ramos al PSG.

El zaguero, que llegó a coste cero tras acabar su contrato con el conjunto bávaro, se siente preparado para el reto. Le sobra atrevimiento, como demuestra el hecho de que haya aceptado portar el dorsal ‘4’ que dejó vacante el camero y le ofreció el club. «Sé lo que significa este número para el club. Para mí es un honor llevarlo y es algo que me motiva mucho», indicó en su primera rueda de prensa, en la que destacó que le hubiera «encantado» jugar con el andaluz.

Alaba manifestó su felicidad por la nueva aventura que comienza. «Es un sueño que se cumple. Es el mayor club del mundo y me llena de orgullo estar aquí. Estoy deseando ponerme la camiseta y marcar goles con el Real Madrid», aseguró el defensa, que tomó la decisión de cambiar de aires «para crecer como jugador pero también como persona».