Reto paralímpico para Juan Bautista
El jugador leonés de tenis de mesa buscará repetir en Tokio el éxito de Río donde se colgó la plata Con 52 años aspira a dos medallas (individual y equipos) en un torneo que levanta el telón el día 25
El leonés Juan Bautista Pérez afronta en Tokio sus segundos Juegos Paralímpicos. HELSING
Juan Bautista Pérez guarda con cariño y orgulloso en un lugar preferente de su casa la medalla de plata lograda hace cinco años en los Juegos Paralímpicos de Río. Sabe que para un deportista es algo único. Para él la recompensa a tantos años de trabajo y el aliciente para que, dentro de unos días, en sus vitrinas esa presea pueda tener una o dos compañeras más. El color es importante aunque no tan esencial para un deporftista que a sus 52 años acude a Tokio dispuesto a demostrar que a pesar de su veteranía tiene calidad a raudales para codearse con el resto de candidatos a la gloria... y también pujar por superarles.
«Me he preparado muy bien. El hecho de no haber tenido recientemente citas internacionales por la pandemia provoca que haya mucho desconocimiento de cómo llegamos cada uno, pero es algo que nadie va a saber hasta que no arranque la competición», apunta este leonés de Cistierna que lleva afincado en Almendralejo unos cuantos años y que se dispone a escribir una nueva página gloriosa en un palmarés único. Y además por partida doble ya que además de la competición individual en la que entrará en acción a partir del 25 de agosto en la fase de grupos también lo hará por equipos junto a José Manuel Ruiz.
El palista de Cistierna buscará superar la plata y el diploma olímpico logrados en 2016
«No lo voy a negar. Mi objetivo es luchar por una medalla. Me lo pongo y es algo que me gusta. Y poder luchar por él. Si después no se cumple, lo importante es pelear por él. Sabiendo lo difícil que es. Que haya obtenido una en Río no quiere decir que sea algo fácil ni que por llegar a Tokio te vayan a dar otra. Eso no va así. Hay que pelearla y, cada vez, los rivales son más fuertes. Yo no voy de vacaciones ni a mirar el paisaje a Tokio. Tengo esa idea y voy a luchar hasta la extenuación», apunta un jugador para el que ser el más veterano de todos los presentes no le inquieta. Ni hace que mire más lejos al podio. Incluso ya se fija metas más lejanas como poder estar en los que serían sus terceros Juegos Paralímpicos, un poco más cerca de España, en París 2024.
«Cuando regresé de Río con la medalla de plata muchos me dijeron que si ya era el momento de la retirada y yo les comenté que me iba a preparar para Tokio 2020. Algunos no me creyeron. Hoy lo digo antes de viajar a Japón para que no me hagáis la pregunta. Voy a trabajar para ir también a París 2024», apuntaba Juan Bautista justo antes de coger el avión junto al resto de representantes españoles con destino a los Juegos. Allí se va a encontrar con otros 14 rivales que como él intentarán colgarse una presea.
Para ello será necesario superar primero la fase de grupos para acceder a los cuartos de final. En el de Juan Bautista de tres accederán dos. Y luego los cruces donde cualquier detalle puede llevarte a lo más alto o a quedarte fuera. El jugador leonés buscará lo primero. Por experiencia y calidad no debe quedar.