La media veda sube un peldaño

La media veda se encamina hacia la primera quincena de actividad y lo hace manteniendo un tono desigual según se trate de unos puntos de la geografía leonesa u otros. Aunque las perspectivas han ido mejorando respecto a un inicio que a pesar de no ser malo se esperaba un poco mejor en cuanto a la pieza estrella que es la codorniz los cazadores que a lo largo de estas fechas han salido al campo han comprobado que al cabo de las jornadas al menos alguna pieza han podido cobrarse para sus perchas.

Bien es cierto que en las zonas de secano el panorama se presenta algo flojo pero también que pasando a otras zonas como la vega del Esla la situación ha mejorado con perchas que han podido llegar a las cuatro codornices al día para los pescadores e incluso en la zona de montaña la situación ha ido más positiva llegando incluso a jornadas con 18 y hasta 20 codornices.

Lo que sí queda claro es que las perspectivas que se habían puesto para esta campaña de media veda en la provincia leonesa no se han cumplido todo lo bien que se esperaba aunque también hay que precisar que la nota que se puede dar es positiva, con matices, y a la espera de que sea incluso más elevada. No hay que olvidar que la media veda bajará el telón el 19 de septiembre y aún quedan semanas por delante para poder dar un giro más notable a esta situación.

También hay que apuntar a otra pieza que en la media veda, aunque en menor medida que la codorniz, también tiene sus adeptos. Y muchos. Se trata del conejo.

En este caso y como viene sucediendo en los últimos años el número de ejemplares es más que elevado, teniendo en cuenta también que no de una forma homogénea con escenarios en los que su cifra poblaciones es sobresaliente con otros en los que por diferentes vicisitudes se puede decir que mejorable.

Sin enfermedades o situaciones dañinas que en estos momentos puedan afectarle la cifra de ejemplares es más que destacada y eso lo están aprovechando los amantes de este tipo de caza para poder firmar jornadas en positivo. Una tónica que viene produciéndose en los últimos años y que apunta a hacerlo al menos en los venideros.

Todo para una media veda que se iniciaba en León el pasado 15 de agosto y que llegaba además con la nueva normativa reguladora para la caza. A este respecto se puede decir que la incertidumbre inicial por parte de los cazadores respecto a la aplicación de todas las normas novedosas ha ido desapareciendo. Algo que no obstante también ha traído a algunos quebraderos de cabeza. Pero con el uso y el paso de los días la normalidad o al menos una dosis importante de esta se está ocupando de abarcar el día a día de los cazadores.

Harán falta más días y tiempo aunque al menos esa incertidumbre en su mayor parte por el desconocimiento a la hora de aplicar determinados apartados de la nueva Ley quede diluida. Eso sí, posiblemente sea cuando se desarrolle la temporada de caza menos para la que la media veda va a resultar un termómetro esencial como la lo ha sido en los últimos ejercicios.

Por el momento el panorama es más que aceptable, mejorable también, pero en líneas generales transitando por un camino con no excesivos baches.