El Bembibre ya nota el efecto Tornadijo

El Atlético Bembibre inició la temporada liguera con un triunfo a domicilio ante el Numancia B (1-2), una victoria que los visitantes fraguaron en unos primeros diez minutos de ensueño.

Visitaba el conjunto leonés al filial del Numancia en busca de los primeros tres puntos de la temporada, y lo dejó claro desde el pitido inicial, con una salida en tromba que sorprendió a propios y extraños. Las ‘Águilas’ no tardaron en hacerse con el control del balón y lanzarse con todo en busca de la portería contraria, protagonizando ya en el primer minuto una buena ocasión de gol en un saque de esquina que Aleixo Cabral remataba alto por muy poco. No reaccionó el Numancia B y en el minuto 5 llegaba el 0-1 en una gran jugada personal de Marcos que se fue con el balón desde el medio campo, sorteando a cuanto rival le salió al paso, para batir al meta local con un perfecto disparo.

No se conformaron los visitantes con ese gol y continuaron atacando sin descanso, tanto, que apenas cuatro minutos mas tarde era Javi Amor el que batía de nuevo la portería de Diego tras un excelente pase de Jorge en la frontal del área.

Con el 0-2 en el marcador y apenas diez minutos de partido transcurridos la tarde prometía. Pero lo cierto es que los leoneses se conformaron demasiado pronto y optaron a partir de ahí por dar un paso atrás y asumir menos riesgos en su juego. El partido se igualó y el Numancia B empezó a tener mas protagonismo. Poco a poco el dominio de los sorianos se fue intensificando y aunque no conseguía generar ocasiones claras de gol, el filial numantino cada vez daba más sensación de poder cambiar el signo del encuentro. Mientras, el Atlético Bembibre trataba de defender con orden, pero no pudo evitar que los locales recortasen distancias en el minuto 45, en una buena jugada que Mallén culminaba con maestría.

Con el 1-2 comenzaba la segunda mitad que, como la primera, empezaba con una tempranera ocasión para el equipo leonés que a punto estaba de hacer el tercero. Pero lo cierto es que tras esos primeros compases la segunda mitad que iba a ser muy distinta de la primera, con un Atlético Bembibre bien pertrechado atrás, empleando todas sus fuerzas en tratar de no dejar maniobrar a su rival.