Fútbol | Primera División
El Athletic neutraliza al Atlético
Intrascendente Griezmann, absurda expulsión de Joao Félix, laberinto del Cholo y tercer empate consecutivo rojiblanco en su feudo El dominio local no surtió efecto
Tercer empate consecutivo en su feudo de un Atlético atascado (0-0), cansado por la resaca europea y frenado por un notable Athletic que puntuó por primera vez en el Metropolitano y desperdició una oportunidad única para ganar. Tremenda batalla táctica cerrada con unas tablas que hacen algo más felices a los vizcaínos, pese a la ocasión final enviada al limbo por Villalibre, y conducen a los colchoneros al diván. Poca fluidez, laberinto táctico, muchos delanteros, pero pocos disparos del ejército de Simeone más allá de un tiro de Llorente al poste.
La impotencia local la expuso como nadie Joao Félix, expulsado poco después de entrar por dos amarillas consecutivas que no tienen justificación. Recibió una falta, soltó un brazo y al ver la amarilla le hizo a Gil Manzano, árbitro maldito para el campeón, el gesto de estar loco. A falta de desequilibrar con su juego, el ‘menino’ ejerció de niñato. Dejó en inferioridad a su equipo en el momento clave.
Más allá de las disputas, poco ocurrió en un primer acto más físico que técnico. Muy poco peligro entre dos rivales a los que no les gusta nada descubrirse. El Atlético no encontró apenas juego por dentro e insistió en tratar de superar la presión de los vizcaínos con rápidos cambios de orientación. Se hizo demasiado previsible porque ya todo el mundo sabe del peligro de la sociedad entre Trippier y Llorente. Algunos detalles de Correa y un par de llegadas mal definidas por Griezmann, de nuevo intrascendente. Enfrente, el Athletic lo intentó a base de acciones de estrategia muy bien trabajada, del buen manejo de Muniain y de balones largos para que corriera al espacio Williams o los aguantase Raúl García. Ninguna maravilla, pero sí lo suficiente para que se jugase a lo que quería.
Se reanudó más rumboso el partido tras el descanso. Pudo marcar Correa, que remató desviado en plancha un centro de Lodi, y desperdició Williams la primera gran ocasión tarde. Recibió de Raúl García, se fue muy fácil de Giménez pero erró en el mano a mano ante Oblak. Triple cambio enseguida del Cholo, que buscó más mordiente con Carrasco y Suárez, y recurrió a Herrera para suplir al lesionado Kondogbia.
Se acentuó el dominio del Atlético, ya con Joao Félix también sobre el terreno. Con el Atlético más volcado, Marcelino dio rienda suelta a Nico Williams y Villalibre. Continuaba la partida de ajedrez, pero el tablero estaba más volcado hacia el área bilbaína. Entró Cunha justo antes de la tontería de Joao. Hasta el final, mucha bronca y ese regalo que desaprovechó Villalibre.