Fútbol | Europa en juego
El Benfica hunde al Barcelona
El conjunto de Koeman es goleado por el cuadro portugués y queda en situación crítica en la Liga de Campeones (3-0)
El estadio Da Luz se ha convertido en un lugar maldito para el Barcelona. El conjunto culé firmó una debacle por 2-8 contra el Bayern de Múnich en este feudo en 2020 y repitió goleada en contra por 3-0 frente al Benfica. El equipo de Ronald Koeman fue incapaz de reaccionar ante un tempranero gol de Darwin Núñez y sucumbió en los últimos minutos ante el empuje del equipo portugués. Con este resultado, el Barça queda en una situación crítica en la Champions después de dos jornadas en las que suma cero puntos, ha recibido seis goles y no ha marcado ninguno.
Apenas tres minutos. Eso es lo que tardó el Benfica en hacer saltar por los aires el planteamiento de Koeman. El técnico neerlandés buscó tener un mayor control del choque con tres centrales y con el regreso al once de jugadores más experimentados como Pedri y Frenkie de Jong, pero todo se fue al garete a las primeras de cambio. Darwin Núñez, un jugador que no va a olvidar la defensa culé, recibió un balón a la espalda de los centrales, encaró a Eric García y batió por bajo al primer palo a Ter Stegen. Partido nuevo nada más pisar el césped.
Pesadilla europea
Tras el varapalo inicial, el Barça reaccionó. La medular blaugrana se hizo con los mandos y el empate pudo llegar antes de la media hora si alguno de los dos De Jong, Pedri o Memphis Depay hubieran acertado ante la portería rival. No lo hicieron y Ronald Koeman pasó al ‘plan B’ retirando del terreno de juego a Gerard Piqué y dando entrada a Gavi.
El cambio no alteró el sistema, sino que retrasó a la zaga a Frenkie de Jong para favorecer la salida de balón en el nuevo escenario del choque. Los nuevos ajustes de Koeman no variaron la inercia de un partido en el que el Barça ya era dominador pero en el que le faltaba la profundidad suficiente para ser más dañino ante la portería defendida por Vlachodimos.
Fracaso en Lisboa
Con este escenario, tantas veces repetido para el Barça la pasada campaña, los culés se marcharon al descanso por detrás en el marcador y con la sensación de que algo debía cambiar si querían dar la vuelta a un choque en el que se estaban viendo superados por un rival directo.
Tras la reanudación, todo lo que podía ir mal, fue peor. El 1-0 en el marcador suponía una situación crítica para el Barcelona en la presente edición de la Champions y Koeman movió fichas con carácter de urgencia. El técnico azulgrana dio entrada a Ansu Fati, Nico y Philippe Coutinho. Sin tiempo para digerir las modificaciones, Joao Mario se internó en el área tras una pared de manual con Yaremchuck y no acertó a batir a Ter Stegen, pero sí lo hizo en el rechace Rafa Silva para mandar al Barça a la Uvi.
El segundo gol del Benfica terminó de hundir a un Barcelona sin alma. En una de esas pugnas, Gilberto ganó en el área a Sergiño Dest y el norteamericano cometió penalti claro por mano. Darwin Núñez cerró su exhibición desde los once metros y selló una goleada que deja más tocado si cabe a Ronald Koeman y al Barça en una situación delicadísima sin puntuar tras las dos primeras jornadas. El colofón final fue la segunda amarilla para Eric García cuando el partido agonizaba.